El presidente Danilo Medina inauguró el nuevo Hospital Regional Nuestra Señora de la Altagracia, a un costo de mil 305 Millones de pesos.
En nuevo centro con la inclusión equipamientos y capacidad para cien camas en el área de internamiento, que beneficiará a miles de familias tanto de la Provincia La Altagracia como de otras de la región Este.
En la actividad estuvieron presentes José Ramón Peralta, ministro Administrativo de la Presidencia; Ramón Guillamo Alfonso, gobernador de La Provincia Altagracia y la ministra de Salud Pública, Altagracia Marcelino.
Además estuvieron el obispo Nicanor Peña Rodríguez, quien bendijo la obra, Francisco Pagán encargado de las Oficina de las Obras del Estado; el doctor Ramón Alvarado, director Nacional de Salud; la ministra de Educación Superior, Ligia Amada Melo; la doctora Mayra Paula, Directora Provincial de Salud; el senador Amable Aristy castro y el presidente de La Federación de Juntas de Vecinos, de la Provincia Altagracia, Felito Martínez, entre otros.
El director de la OISOE, Francisco Pagán Rodríguez, pronunció el discurso central dijo que el nuevo hospital, es una obra de calidad arquitectónica y equipada con el última tecnología.
Dijo que el interés del presidente Medina a favor de la salud pública ha hecho posible, “el logro de los cambios necesarios de nuestra viejas y cansada estructuras hospitalarias, un cambio por los más nuevos y modernos, a la altura de las necesidades de la medicina moderna, de las avanzadas tecnologías de las ciencias medicas”.
Mientras que la ministra de Salud explicó que este es uno de los hospitales más mordemos del país, de otros centros internacionales, el cual contará con los mejores diagnostico de imágenes, como tomógrafos, mamografía, rayo (X), equipos de endoscopia, laboratorios, salas Hemodiálisis y otros.
Aseguró que los pobladores de estas zonas no sufrirán por falta de un centro, ya que cada vez ocurría un accidente, tenían que ser trasladados a otro centro del país.
La funcionaria llamó a cuidar el centro hospitalario y dijo que la mayoría de los empleados y profesionales tendrán que vivir aquí, para que los pacientes no tengan que esperan que ellos lleguen de otros lugares.
