El médico legisla Orlando Herrera Robles certificó la muerte de “Quirinito” asegurando que habría muerto por un fallo cardíaco, debido a un infarto agudo al miocardio. Ayer la Procuraduría General de la República descartó esta posibilidad y asegura que Alejandro Castillo Paniagua no ha muerto.
El certificado de defunción señala que la supuesta muerte de “Quirinito” se trató de “un carcinoma epidermoide en la base de la lengua”.
La Procuraduría General de la República aseguró ayer en un comunicado de prensa que con esta medida del médico Herrera Robles no se descarta “que el galeno actuante sea procesado judicialmente al concluir la investigación”.
La muerte de “Quirinito”, sobrino Quirino Ernesto Paulino Castillo, condenado por narcotráfico, fue certificada el pasado 5 de julio, y lleva por número 00239, Folio 0039. Fue registrada el 6 de julio del presente año.
Alejandro Castillo Panigua fue condenado a 30 años de prisión por asesinar al ciudadano español Gustavo Adolfo Cervantes, alias Waikikí. En mayo de este año fue trasladado desde un centro correccional a un apartamento, bajo custodia, en San Francisco de Macorís.
La Procuraduría General de la República comenzó una investigación para determinar si ciertamente el hombre habría muerto, y ayer informó que tiene evidencias de que no ha sido así. Por esa razón emitió una orden de captura nacional e internacional, para detener al prófugo.
La investigación de la Procuraduría comenzó a comienzos del mes de septiembre ante el surgimiento de versiones de que el hombre no estaba muerto. Hasta el momento se desconoce el paradero de Alejandro Castillo Paniagua.