“Fue un gancho infernal”, reconoció Alistair Overeem. El británico hizo una esquiva típica de boxeo moviendo su tronco hacia abajo y Francis Ngannou, su rival, le mandó a la lona con un misil desde su brazo izquierdo. Tuvo ‘suerte’ de que el camerunés no fuera con una patada. Floyd Mayweather ha sido durante toda su trayectoria un artista de las esquivas y pocos golpes en su rostro ha recibido, al menos hasta ahora, cuando a sus 41 años se está pensando una oferta de 1.000 millones de dólares para realizar tres o cuatro combates (suicidas) en UFC, presuntamente como revancha de Conor McGregor.
“La UFC me llamó y me dijeron que volviese. Puedo hacerlo. Si quiero puedo volver haciendo UFC, puedo ir a luchar al octágono. Tengo una oferta y podría hacer un trato de tres o cuatro peleas en el octágono para ganar 1.000 millones de dólares. Soy el mejor de todos los tiempos. No quiero escuchar a nadie decir que hay otro mejor. A día de hoy soy el mejor atleta de todos los tiempos. No hay nadie mejor que yo”, ha señalado un envalentonado Floyd Mayweather.
Los guantes de 4 onzas de la MMA no admiten error, no son los acolchados guantes de boxeo a los que Mayweather está acostumbrado. No obstante, si el tema de los puñetazos fuera el mayor peligro, el norteamericano con un récord de 50-0 en su palmarés quizás podría competir con un pegador como McGregor. El irlandés es un striker y esa sería la ‘suerte’ para Floyd. Aunque no está acostumbrado a tener que prevenirse de patadas.
Las patadas, sin embargo, tampoco serían el mayor enemigo para Mayweather. Las técnicas de sumisión -judo, jiu jitsu brasileño, sambo, ju jutsu…-, las de luxación -achilles lock, armbar, americana, kimura, leglock, neck crank, toe hold, heel hock…-, las de estrangulación -arm triangle choke, anaconda, bulldog choke, front, guillotina…- o incluso un golpeo slam le pueden sonar tan a chino a Mayweather como a un profano en la materia de las MMA (teóricamente lo que es Mayweather). Y son estas, junto con la técnica del agarre, las que le convierten en un muñeco en manos de experto como es McGregor. Si éste se empleara a fondo, la salud de Mayweather corre peligro porque no necesita una preparación de unos meses, sino de años… y su edad está ‘peleada’ con la idea de esfuerzos máximos concentrados que requiere un combate de MMA. Aparte del talento para aplicar la técnica.
Mayweather ‘jugó’ con McGregor en su farsa de este verano. Y ahora la venganza, aunque sea multimillonaria, no tendría comparación porque si las MMA engloba a diferentes deportes, entre ellos el boxeo, éste es sólo uno más dentro de una jaula de la UFC. Los golpes y los enganchones pueden venir por cualquier lado.
A principios de los 90, cuando comenzaron a expandirse los combates de las MMA, se mezclaban en la jaula a especialistas de diferentes disciplinas (boxeadores, judocas, taekwondistas…) y, en general, salía victorioso el practicante de jiu jitsu. McGregor no es experto en este arte, pero no le suena a chino y en un hipotético combate frente a Mayweather lo podría practicar como si de un sparring se tratara. McGregor, con 29 años, podría destrozar a Mayweather en un octágono.