María Balvina Rodríguez (Liberata), una de las empleadas domésticas de la imputada Marlin Martínez, reveló que el día del crimen de la menor Emely Peguero, ella dio una pastilla a su hijo, Marlon Martínez, para que se durmiera, y dejó otra para que la tomara tan pronto despertara.
Liberata cuenta que el día del hecho, Marlon Martínez, quien cumple prisión preventiva en el centro penitenciario de San Francisco de Macorís, estaba en el apartamento encerrado en su habitación y no hablaba con nadie, y que luego del desayuno fue cuando se le dio a tomar la pastilla.
La revelación está contenida en los interrogatorios realizados por el fiscal titular de la provincia Hermanas Mirabal, José Vitervo Cabral, y la fiscalizadora Claudia Cecilia Román Guzmán, a la doméstica de Marlin Martínez, a los que CDN tuvo acceso y suministró al Listín Diario.
“Yo estaba allá ese día porque estaba atendiendo a uno de los niños de Marlin; Marlon llegó con Solanyi como a las nueve de la mañana, se desmayó, y Marlin le dio una pastilla para que se durmiera y me dejó otra para que se la diera cuando despertara”, acotó. Ante la pregunta de si ella notó algo extraño o faltaba algo en el apartamento, contestó: “No vi nada raro; lo único que noté es que faltaba un suape grande que usamos para limpiar”, instrumento con el que se presume fue limpiada la escena del crimen.
Al día siguiente de la desaparición de la adolescente, su novio Marlon y su madre Marlin dijeron ante las cámaras de televisión que no sabían dónde estaba. Se mostraron consternados y le pedían a Peguero que volviera, que no los hiciera sufrir más. La doméstica dijo que conocía a Marlon, porque lo vio en el apartamento de San Francisco de Macorís de Marlin, “pero nunca he hablado mucho con él, porque siempre que yo iba él vivía metido en la habitación y no hablaba con nadie”.
Marlin Martínez está recluida en la cárcel Rafey-Mujeres de Santiago cumpliendo prisión preventiva mientras se investiga el caso.
Retiro
Liberata confesó que el 23 de agosto, días antes de encontrar el cadáver de Emely Peguero, asesinada en estado de gestación, recibió una llamada de Marlin para que retirara 100,000 pesos para un supuesto pago de gasoil.
Agregó que el dinero se lo entregó posteriormente a Simón Bolívar Ureña Almánzar (Boli o Machú), señalado como la persona que habría participado en el traslado del cuerpo de Emely junto a Marlin Martínez, principales sospechosos por el asesinato de la menor de 16 años de edad, que estaba embarazada.