El presidente de la Cámara de Diputados, Rubén Maldonado, presentó este martes las memorias de su ejecución donde destacó las principales iniciativas que impulsó a los fines de que pueda cumplir más efectivamente su rol de representar, fiscalizar y legislar.
Dijo que acercar la Cámara a la población fue uno de los dos ejes fundamentales de su gestión, mientras que el otro estuvo orientado a fortalecer la institucionalidad democrática, procurando la aprobación de las leyes que por mandato de la Constitución de 2010 están pendientes, así como las que se han derivado de sentencias exhortativas del Tribunal Constitucional y de la Estrategia Nacional de Desarrollo.
Maldonado manifestó que su gestión de un año en la presidencia de la Cámara fue breve e intensa, realizando una ardua tarea que fue posible porque estuvo acompañado de un equipo de especialistas y técnicos legislativos, así como el de alta gerencia y de tecnología de la información.
Sostuvo que aunque desde un principio sabía que un año podía resultar poco tiempo para materializar los planes y tareas que se propuso, siempre tuvo la convicción de que cuando se tienen objetivos definidos, vocación de servicio y la colaboración entusiasta de los diputados, nada sería un obstáculo para lograr metas y alcanzar el éxito.
En lo que concierne a la institucionalidad democrática, en la primera sesión que encabezó sometió al Pleno de la Cámara solicitud de que fuera creada una comisión especial para definir cuáles son las leyes que por mandato de la Constitución de 2010 deben ser aprobadas por el Congreso. La comisión –dijo- hizo un enjundioso estudio en el que determinó cuáles de esas leyes habían sido aprobadas y cuáles seguían pendientes.