Caracas. La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, afirmó ayer jueves que el Palacio de Miraflores había entregado una lista de medicinas y alimentos a la Unión Europea para canalizar, a través de Naciones Unidas, un paquete de ayuda humanitaria y asistencia técnica al país latinoamericano por un monto comprendido en 1,760 millones de euros.
De acuerdo con agencias de prensa, poco antes de las declaraciones de Rodríguez, en una intervención televisada, el presidente Nicolás Maduro había comentado la noticia, aludiendo además a la pronta llegada al país de un lote de 300 toneladas de medicamentos desde Rusia, parte importante de ellos de alto costo, a través de la Organización Panamericana de la Salud.
Delcy Rodríguez afirmó que el acuerdo planteado, el cual fue posible gracias a las gestiones del denominado Grupo de Contacto (integrado por la Unión Europea y Uruguay), respeta los parámetros constitucionales del país y criticó con dureza el “show” que la oposición venezolana, apadrinada por Estados Unidos, tiene previsto hacer en la frontera ofreciendo un concierto para respaldar el ingreso de ayuda humanitaria. Maduro agregó que Venezuela “pagará, como lo ha hecho siempre, dignamente, dólar por dólar, euro por euro, estas donaciones”.
Las declaraciones de Maduro y Rodríguez han roto un dogma mantenido a rajatabla por todos los funcionarios importantes del chavismo en estos años: que en Venezuela no existe crisis humanitaria, que el país no necesita ayuda y que tal historia está siendo propagada de forma malintencionada por la oposición y los grandes medios de comunicación para fomentar una intervención internacional en el país sudamericano.
Hieren indígenas
Ayer, cinco personas de nacionalidad venezolana fueron ingresados en el hospital general de Roraima después de resultar heridos durante un enfrentamiento en el estado venezolano de Bolívar (sur), fronterizo con Brasil, confirmaron a Efe fuentes oficiales.
Las cinco personas fueron heridas de bala en el choque en la frontera y tres de ellos están siendo sometidos a procedimientos quirúrgicos en el hospital general de Roraima, situado en Boa Vista, según dijeron a Efe fuentes del gobierno regional.
Diputados de Bolívar dijeron que los indígenas pemones de la comunidad kumarakapay se enfrentaron a militares para impedir el bloqueo de la ayuda humanitaria que seacopia en el estado brasileño de Roraima y que el Gobierno de Nicolás Maduro se niega a aceptar.
Cierre de frontera
El Gobierno venezolano informó que cerró de forma “total” la frontera con Colombia ante las supuestas “amenazas” contra su soberanía que surgen desde este país, y desde el cual la oposición espera ingresar en pocas horas las donaciones de varios países que se almacenan en la ciudad de Cúcuta. Esta medida ocurre solo horas después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ordenara el cierre de comunicaciones con las islas de Aruba, Bonaire y Curazao -todas territorios de Países Bajos- y clausurara la frontera con Brasil, donde también se acopian ayudas para los venezolanos.
Una crisis y 2 conciertos dividen a Venezuela
La zona fronteriza entre Venezuela y Colombia fue escenario ayer de dos grandes conciertos con la crisis venezolana de fondo: uno convocado en apoyo a Juan Guaidó por el multimillonario Richard Branson en Cúcuta, en el lado colombiano, y el otro en Ureña, estado de Táchira, por el presidente Nicolás Maduro. En el concierto de Cúcuta, Juan Guaidó estuvo acompañado de los mandatarios de Colombia, Chile, Paraguay y el secretario de la OEA. En el lado venezolano miles de personas vitoreaban al presidente Maduro, mientras fuerzas militares se aseguraban de que no se alteran los ánimos. Ambos conciertos fueron demostrativos de la crispación política en Venezuela.
