El candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y fuerzas aliadas, Luis Abinader, manifestó este domingo su satisfacción porque las encuestas que está viendo establecen que en este momento la alianza que encabeza su partido está ganando el 65% de los municipios y distritos, como parte de la ola de apoyo al cambio que se incrementa cada día en todo el país.
“Hace un par de meses dije que me estaba riendo al ver nuestro avance imparable en el nivel presidencial, y hoy les informo que ese avance se está produciendo también en el nivel municipal, en el que hoy tenemos ganadas el 65% de las alcaldías”, reveló.
De inmediato exhortó a todos los candidatos municipales y a la dirigencia que los apoya, a mantener la concentración permanente en el cumplimiento de las tareas que han de consolidar el triunfo.
“Mi exhortación es que cada simpatizante del Cambio vaya a las elecciones del 16 de febrero a votar por cada alcalde, regidor, director de distrito o vocal como si estuvieran votando por nuestra candidatura presidencial”, subrayó.
El gran encuentro de candidatos municipales y dirigentes del PRM se efectuó este domingo en el hotel Lina con la presencia del ex presidente Hipólito Mejía, la ex vicepresidenta Milagros Ortiz Bosch, palabras de bienvenida de la secretaria general y candidata a alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía.
Además la participación de Roberto Fulcar, primer vicepresidente y coordinador general de campaña del PRM y aliados, quien motivó la reunión, y otros dirigentes que tuvieron a cargo orientar la gestión del voto. El encuentro fue convocado por la secretaria Nacional de Organización y la Dirección de Operaciones de la Campaña de Abinader, que coordina el ingeniero Deligne Ascensión.
Ampliar el apoyo
En su discurso, Abinader exhortó ampliar el apoyo que les están dando los diferentes sectores políticos y sociales comprometidos con un cambio en la conducción del país, tomando en cuenta que en las elecciones no presidenciales baja la participación de los electores, por lo que deben convertir en votos las simpatías por el partido, por su candidatura presidencial y las de todos los candidatos municipales y congresuales.