Los peligrosos incendios forestales que amenazan este viernes a California se cobraron ya la primera víctima mortal, destruyeron decenas de casas y obligaron a ordenar la evacuación obligatoria de unas 100.000 viviendas y cerrar carreteras y escuelas.
Mientras miles de personas siguen sin electricidad en todo el estado por el riesgo de que se desaten nuevos incendios forestales, la mayor preocupación de las autoridades se concentra en el norte de Los Ángeles, donde el fuego denominado Saddleridge causó la muerte a una persona.