SANTO DOMINGO. El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) cumplirá 44 años de fundado el próximo día 15 de diciembre, aniversario que lo encuentra en una de sus situaciones más incómodas y riesgosas para su unidad.
La disputa por el poder que han adelantado el presidente Danilo Medina y el expresidente Leonel Fernández es el resultado de un proceso de relevo que no ha sido posible en el PLD desde que se abrió a las masas en el 2001.
El PLD ha tenido las mismas autoridades y se ha limitado a ampliar los comités intermedios y de base.
Esos últimos escenarios de ampliaciones de organismos sólo han servido para que la tendencia de Fernández o la de Medina se hayan impuesto, dependiendo de cuál de las dos esté ejerciendo el poder en ese momento.
La organización fundada por Juan Bosch el 15 de diciembre de 1973 ha perdido su mística ideológica y se ha convertido en una maquinaria electoral que opera con más efectividad desde el Estado para vencer a una oposición que ha venido fragmentándose. Otro punto que ha afectado a la organización es que no ha puesto en marchas las medidas que se redactaron en el VIII Congreso Norge Botello que desarrolló en el 2013.
Entre los puntos que no se han puesto en funcionamiento de ese Congreso están el de Organización y Funcionamiento del Comité Central; Funcionamiento de la Unidad de Fiscalización, Evaluación y Control; del Secretariado; de Disciplina y Ética y para la elección y multiplicación de las diferentes direcciones provinciales, municipales de Circunscripciones Electorales, de Seccionales, de Bloques de Comités Intermedios y de Comités Intermedios.
