El futuro mandatario de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó hoy que renunciará a la seguridad oficial, a la residencia de Los Pinos y al avión presidencial, manteniendo sus promesas de campaña.
“He sostenido que me cuida la gente y me cuida el pueblo, y el que lucha por la justicia no tiene nada que temer”, afirmó en rueda de prensa el líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y ganador de la Presidencia el pasado domingo.
De esta manera, respondió que evaluará el uso de fuerzas de seguridad pública para su protección, especialmente del Estado Mayor Presidencial.
Explicó que no va a desaparecer el Estado Mayor Presidencial, cuerpo militar de elite, sino que se va a incorporar a la Secretaría (ministerio) de Defensa “por completo” y ya no estará “encargado de custodiar al presidente de la República”.
“Me va a cuidar la gente del pueblo y me van a cuidar ustedes”, dijo López Obrador, que antes y después de entrar a Palacio Nacional fue rodeado por multitud de medios de comunicación y simpatizantes en la calle.
El futuro presidente de México anunció que convertirá la residencia oficial de Los Pinos en “un espacio para las artes y para la cultura del pueblo de México”, y que él no vivirá en este espacio.
En esta rueda de prensa, de unos 40 minutos, también explicó que no usará el avión presidencial.
“No voy a trasladarme en aviones de gobierno, ni tampoco en helicópteros. Cuando tenga que viajar lo haré como siempre, en aviones de línea comercial”, indicó.