El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, quien asumirá el cargo el 1 de diciembre, prometió hoy que ofrecerá “siempre diálogo” al Gobierno estadounidense de Donald Trump pero descartó abordar la construcción del muro fronterizo que exige Washington.
“Afortunadamente ya no se habla mucho de ese tema y yo no quiero hablar de ese tema”, dijo sobre el muro López Obrador, quien aseguró que su equipo “no tiene en la agenda esa palabra”.
Esta mañana Trump argumentó a través de su cuenta de Twitter que los altos niveles de violencia que sufre México son “una de las razones por las que necesitamos una Gran Seguridad Fronteriza”.
Al ser interrogado sobre eso en rueda de prensa, López Obrador sostuvo que el presidente estadounidense “tiene su libertad para expresarse”, pero el próximo gobierno mexicano tendrá como objetivo tejer “una relación de amistad, amor y paz” con Estados Unidos.
“Vamos a tratar de buscar una relación amistosa. Queremos diálogo y, si no hay diálogo, la otra vía va a ser diálogo y más diálogo. Siempre diálogo. No queremos pleitos”, sostuvo en rueda de prensa.
El líder izquierdista agregó que “queremos convencer (a Trump) que nos conviene una relación de amistad y cooperación para el desarrollo”.
López Obrador sugirió que este “acuerdo adicional” podría alcanzarse en paralelo con la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entre México, Estados Unidos y Canadá.
El Gobierno mexicano y el equipo de López Obrador trabajan conjuntamente en las renegociaciones del TLCAN para que se cierre un acuerdo definitivo “en los próximos días”, dijo el próximo mandatario.
Desde que López Obrador ganó las elecciones presidenciales del 1 de julio, ambos líderes se han dedicado palabras amables y se han emplazado a trabajar de manera conjunta cuando el nuevo presidente mexicano asuma el cargo.
López Obrador anunció que invitará a Trump a su toma de posesión el 1 de diciembre y una delegación estadounidense de alto nivel, encabezada por el secretario de Estado, Mike Pompeo, se reunió con el líder mexicano hace tres semanas en Ciudad de México.
Este acercamiento llega tras meses de tensiones entre el Gobierno estadounidense y el Ejecutivo mexicano, encabezado por Enrique Peña Nieto, con motivo de la retórica antiinmigración de Trump.