Luego de 24 horas de que sus familiares la reportaran como desaparecida, el cuerpo de una joven de 19 años llamada Kenneka Jenkins fue encontrado dentro de un refrigerador de la cocina del hotel Crowne Plaza, en Chicago, Estados Unidos.
¿Cómo llegó ahí? Esa es la incógnita que ahora prepondera en la investigación.
En las últimas horas, la Policía de Rosemont ha difundido una serie de videos en donde se aprecia claramente a Kenneka en distintos lugares dentro del hotel, pero sin que aparezca algún detalle que pueda llevar a la resolución y sobre todo, a dar con el paradero de su asesino.
El hecho ocurrió el 7 de septiembre. Dos personas se registraron con nombres falsos en este hotel para organizar ahí una fiesta dos días después, para 30 personas, a la cual acudió la chica.
Al finalizar la celebración, los amigos de Jenkins la dejaron sola, por unos minutos, en el hall del hotel, para ir a buscar el auto en el que viajaban, pero al regresar al sitio, la joven ya no estaba. Así que trataron de llamarle por teléfono, pero no tuvieron éxito.
Los videos de las cámaras de seguridad del hotel muestran a Kenneka saliendo de un elevador, tambaleándose sobre los pasillos y logra sostenerse de pie con ayuda de las paredes. Posteriormente, se le ve ingresar a una cocina del hotel, en donde se ve que, aparentemente, no hay nadie. Luego de esto, no se le vuelve a ver por el lugar.
“Quiero saber qué ocurrió. Quiero verlo todo. Quiero verla a ella caminando a ese freezer y encerrándose dentro del freezer y congelarse hasta la muerte”, dijo Teresa Martin, la madre de la fallecida, durante una conferencia de prensa en la que denunció la poca atención de las autoridades durante la desaparición de su hija.
En las redes puede encontrarase también la llamada al 911 de la madre de Kenneka Jenkings denunciando la desaparición de su hija a las 5:oo am con su versión de los sucesos hasta ese momento: