Líderes del mundo reaccionaron a la quinta prueba nuclear considerada la más grande realizada por el gobierno de Corea del Norte.
El presidente Barack Obama señaló que el ensayo nuclear representa “una grave amenaza a la seguridad regional, la paz internacional y la estabilidad”.
Por su parte, el presidente de Corea del Sur calificó la detonación como un acto de “imprudencia fanática”.
El gobierno norcoreano dijo que con esta prueba han probado su capacidad para construir a futuro una variedad de armas nucleares poderosas, pero a la vez pequeñas y ligeras.
Las acciones de Corea del Norte levantan muchas preocupaciones alrededor del mundo al considerarse un paso hacia adelante para que Pyongyang logre su objetivo de construir un misil nuclear que pueda impactar algún día territorio estadounidense.
Estas pruebas nucleares son prohibidas por las Naciones Unidas, pero esta sería la segunda realizada por Corea del Norte este año.
El consejo de seguridad de Naciones Unidas espera reunirse a puerta cerrada para debatir cómo responderán a la quinta prueba nuclear de Pyongyang. Estados Unidos, Japón y Corea del Sur solicitaron la reunión de emergencia.