EEUU.- El comerciante dominicano Elsido Pereyra, condenado en 1999 a cadena perpetua por el asesinato del adolescente Ricardo Torres, el 10 de junio de 1998, saldrá en libertad condicional, acorde con la decisión de la Junta de Libertad Palabra, después de cumplir 17 años de la condena a vida, pero una de las condiciones es que será deportado a la República Dominicana. El dominicano tiene 50 años de edad.
Pereyra, era dueño de un negocio en Lawrence cuando disparó a la víctima y se le concedió una petición de aplazamiento de su sentencia a cadena perpetua.
La junta tomó la decisión el 10 de junio aprobando la solicitud por unanimidad. Pereyra se declaró culpable de asesinato en segundo grado en 1999.
Su libertad condicional viene con una serie de condiciones, entre ellas que después de su liberación Pereyra será deportado a su natal República Dominicana.
En la decisión la junta sostuvo la opinión de que Pereyra había “demostrado progreso de rehabilitación.”
“Él aparece empático y perspicaz en cuanto a su comportamiento que resultó en la muerte de (Ricardo Torres)”, dijo la decisión.
Pereyra disparó matando a Torres quien tenía 17 años de edad, el 3 de mayo de 1998.
Con 34 años, siendo propietario del supermercado “El Coquí”, en la calle Newbury en Lawrence, Pereyra fue uno de los comerciantes más reconocidos en esa ciudad de Massachusetts.
El día del asesinato, la novia de Torres estaba en el negocio cuando un hermano de Pereyra y que era su empleado, hizo un “comentario lascivo” sobre su cuerpo.
Ella se lo dijo a Torres, y hubo un breve enfrentamiento entre Torres y el hermano de Pereyra dentro de la tienda.
El hermano llamó a Pereyra, quien fue a la tienda, le habló a su hermano, y luego se enfrentó a Torres frente al establecimiento.
Ambos se enfrentaron en una pelea y Torres salió huyendo, Pereyra sacó un arma y le disparó por la espalda.
El supermercado de Pereyra fue destruido por un incendio varios días después del asesinato, y se dijo que fue provocado por pandilleros de gangas, a una de las cuales, supuestamente pertenecía Torres.
Pereyra se declaró culpable de asesinato en segundo grado en Essex Corte Superior y fue condenado a cadena perpetua el 2 de marzo de 1999.
Había solicitado la libertad condicional en el 2013 y se le negó. Una revisión de la decisión duró dos años.
La abogada Eva Clark representó Pereyra en su audiencia de libertad condicional el 7 de abril.
Pereyra, con la ayuda de un traductor, “expresó su remordimiento y vergüenza” por el asesinato ante la Junta.
Mientras cumplía su condena, Pereyra completó varios programas para ayudar a su comportamiento y reintegración a la comunidad.
La fiscal adjunta del condado de Essex Emily Mello, presentó una carta y habló en contra de la libertad condicional, diciendo que la justificación de Pereyra respecto al asesinato de Torres es “egoísta y muestra una falta de comprensión de su pensamiento criminal, y demuestra una falta de voluntad para asumir la responsabilidad de sus acciones”.
Varios de los miembros y amigos de la familia de Pereyra asistieron a la audiencia en apoyo de su libertad condicional.
Nadie de la familia de la víctima se encontraba presente en la audiencia para oponerse.
La junta concedió por unanimidad la liberación de Pereyra y será entregado a la policía de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para ser deportado a la República Dominicana.