La expectativa ante el recrudecimiento de la hostilidad entre EEUU y Corea del Norte ha desatado una serie de análisis políticos y especulaciones en torno a un posible conflicto armado que incluso ha sido equiparado con una tercera guerra mundial.
Sin embargo, el politólogo Guevorg Mirzaián expuso a la agencia RIA Novosti su examen sobre la situación.
De acuerdo con el experto, tanto el gobierno de EEUU como los principales actores de la región (Japón, Corea del Sur y Corea del Norte), entienden que un conflicto entre ambos países resultaría muy caro para todos.
Mirzaián explica 3 razones fundamentales por la que los países involucrados no buscan desatar una guerra en realidad:
a) Seúl quedaría reducido a cenizas ante el arsenal norcoreano que fulminaría a la capital de Corea del Sur, ubicada a unas 31 millas de la frontera.
b) Si Corea del Norte fuera destruida por un conflicto bélico, el costo de integrarla y reconstruirla sería altísimo.
c) Pekín, uno de los aliados de Corea del Norte, podría involucrarse en el conflicto.
Un conflicto con Corea del Norte “tiene un nivel muy alto de amenaza pero una probabilidad baja de derivar en una guerra real“, explica el politólogo.
“Por eso ningún presidente estadounidense ha atacado Corea del Norte y ninguna de las crisis en la Península ha terminado en una guerra”, señala en el artículo.
Ante la actitud desafiante de Donald Trump, Mirzaián asegura que en realidad el presidente estadounidense busca presionar a Pekín para que, a su vez, contenga a Pyongyang.
El investigador asegura que entre los próximos movimientos en la región veremos una mayor cooperación militar entre EEUU, Japón y Corea del Sur.