La controvertida cantante ha engordado once kilos en los últimos meses, algo de lo que culpa a su padre, Joe Germanotta, ya que la comida que le prepara en su restaurante de Nueva York -Joanne Trattoria- es tan deliciosa, que no puede evitar hincharse a pizza y pasta cada vez que le visita.
”Me encanta la pasta, soy una italiana de Nueva York. Mi padre abrió un restaurante y es increíble. Absolutamente delicioso, pero tengo que reconocer que engordo dos kilos cada vez que voy. Mi padre quiere que vaya a menudo pero yo le contesto que adonde tengo que ir es a algún sitio donde solo me sirvan zumos de verdura”, dijo la artista en el programa estadounidense ‘Elvis Duran and the Morning Show’.
Gaga, cuyo peso ha variado considerablemente en otras ocasiones, insiste en que está contenta con sus curvas, aunque todo tiene un límite, de modo que tras ganar once kilos ha decidido ponerse a dieta.
”No me siento mal por mi peso, pero es duro porque tengo que hacer frente a espectáculos muy activos. Estoy tratando de encontrar el equilibrio”,