En Puerto Príncipe cada vez suman más los vecindarios a los que la Policía Haitiana no puede ingresar. A pesar de la calma que se respira luego de la parálisis gubernamental de principios de noviembre, su situación sociopolítica no ha mejorado y la confluencia de reconocidas pandillas y bandas paramilitares, incluso a lo interno del cuerpo del orden, puede traducirse en un estallido social similar al que vivió la nación con el Golpe de Estado del año 2004, aunque esta vez sin la insignia del ex militar y narcotraficante Guy Phillipe.
Así fue reseñado por el Miami Herald en una crónica firmada por la periodista Jacqueline Charles, en la que devela una serie de prácticas judiciales y extrajudiciales que evidencian la vulnerabilidad del orden público y de su desintegrado sistema de justicia.
Aquí la narración de Charles, que originalmente fue publicada en el idioma inglés: