Por Cesar Medina
Juan José Hidalgo es uno de los más importantes inversionistas españoles en República Dominicana. Pero es, además, el de mayor arraigo emocional porque admira a este país, ama a su gente, cree en su futuro…
Desde que vino por primera vez, hace dos décadas, Don Pepe no se ha desvinculado jamás de la isla… Casi todo el dinero que ha ganado en España y el resto de Europa en el negocio del transporte aéreo, la hosteleríañ así con Sñ el turismo y los bienes raíces, lo ha invertido aquí: más de mil millones de dólares.
Apostó al desarrollo de la costa Este cuando pocos creían en tal posibilidad, fuera de Frank Rainieri…Cuando se desplomó el turismo del Norte, invirtió más de cien millones de dólares en Puerto Plata y rehabilitó Cofresí y todo su entorno y programó dos vuelos semanales de su aerolínea Air Europa al aeropuerto Gregorio Luperón para traer turistas europeos.
Se metió de lleno en Juan Dolio cuando nadie pensaba en su potencialidad, adquirió el hotel Hamaca, de Boca Chica, e invirtió casi 300 millones de dólares en su remozamiento y ampliación; adquirió terrenos en Miches para abrir nuevas posibilidades de explotación turística, en Bávaro, en Punta Cana, en Romana…
En la capital también invirtió en la adquisición compartida del Hispaniola con el propósito de remodelarlo, ampliarlo y convertirlo en un establecimiento moderno con los estándares de un hotel citadino a la altura de lo que es hoy la capital dominicana.
En este país Don Pepe lo ha metido todo… Sus ahorros de 60 años de trabajo sin descanso, sus anhelos y sueños familiares, el futuro de su descendencia, de sus hijos, de sus nietos… ¡Todo lo ha invertido aquí!
Air Europa… A sus pies
Cuando la estatal línea aérea española Iberia sorprendió a medio mundo con el anunció de que suspendía su itinerario de vuelos a República Dominicana, el gobierno de Danilo Medina hizo esfuerzos para que una medida que potencialmente ponía en riesgo el flujo turístico europeo fuese postergada hasta el verano de este año.
La respuesta fue tajantemente negativa… Era una decisión impostergable, sin importar el daño que eventualmente pudiese causar a nuestra economía. La empresa estaba en crisis y era esa la forma de atenuarla.
El gobierno acudió entonces a Air Europa, la otra línea aérea con vuelos directos Madrid-Santo Domingo, Madrid-Punta Cana, Madrid-Puerto Plata…
Don Pepe llamó de inmediato por teléfono al presidente Danilo Medina y luego al ministro de Turismo, Francisco Javier García… “Hágase de cuenta, amigo Presidente, que Air Europa pertenece al gobierno dominicano… Disponga de ella a la conveniencia del interés de los dominicanos…”
Más adelante prometió que jamás un europeo dejará de llegar a la República Dominicana por falta de un asiento de avión. E inmediatamente ordenó que a partir de ese momento se colocasen en el sistema de Air Europa otros 10 vuelos semanales desde Madrid a República Dominicana sin hacer ni siquiera estudio de factibilidad económica.
Y así viene ocurriendo desde el día primero de abril cuando Iberia retiró sus vuelos hacia República Dominicana.
¡Abuso incalificable!
A cambio de su amor por este país, de su solidaridad, de su apuesta por República Dominicana, Don Pepe Hidalgo ha recibido maltratos, atropellos, estafas…
Lo tienen de mojiganga dando dos y tres viajes mensuales a los tribunales de Higüey, de Puerto Plata, de Santo Domingo, a responder por acusaciones maliciosas, carentes de sustento legal, formuladas por abogaduchos y avivatos que han pretendido chantajearlo y extorsionarlo para sacarle dinero.
Lo peor es que algunos jueces se han prestado al chantaje, y en cada citación le hacen saber que tiene que presentarse personalmente al tribunal o dictan en su contra orden de búsqueda y captura… “Como si fuera yo un criminal prófugo de la Justicia”.
En ocasiones Don Pepe ha tenido que suspender compromisos hasta con el propio Rey de España o con el Presidente del Gobierno de su país para estar presente en un tribunal higüeyano o puertoplateño que le hace perder días enteros para luego descartar la acusación por infundada.
En este momento está pendiente de fallo en la Suprema la más grande estafa en su contra. Un empresario artístico le vendió una “zona de playa” en Higüey que resultó ser unos humedales. Como había avanzado 24 millones de dólares ñcasi mil millones de pesosñ quiso deshacer la operación. Pero el empresario artístico lo demandó y sacó una sentencia condenatoria con un juez local…
Ahora le quieren obligar a perder los 24 millones de dólares. Además, entregar casi la mitad del hotel Hamaca, que nada tiene que ver con eso… Y otras tantas propiedades en Juan Dolio…
¡Lo tienen a punto de coger el monte…!
La justicia se confabula en el acoso