Madrid.- Formaciones de la izquierda española, al margen de los socialistas del PSOE, negocian con vistas a las elecciones legislativas del 26 de junio con el objetivo de ser la fuerza progresista más votada.
Los protagonistas de las negociaciones son Podemos, que con sus aliados regionales logró en los comicios del 20 de diciembre el 20,7 por ciento de los votos (69 escaños), e Izquierda Unida (IU), formación que alcanzó el 3,7 por ciento y dos diputados.
Ambos quedaron por detrás del PSOE, que consiguió el 22 por ciento, con noventa diputados.
Ahora Podemos e IU negocian contrarreloj para tener una coalición electoral y colocarse por delante de los socialistas.
El sondeo del oficial Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicado ayer otorga a Podemos y sus aliados territoriales el 17,7 por ciento de la intención de voto y a IU el 5,4, por lo que la eventual suma de ambos llegaría al 23,1 por ciento, más que lo atribuido en la encuesta al PSOE, que bajaría al 21,6 por ciento.