Los libreros y expositores que participan en la Feria Internacional del Libro esperan que el público abarrote la Plaza de la Cultura y que las ventas superen las de otros años.
Por eso despliegan con entusiasmo las ofertas que tienen, en espera de que los interesados adquieran una inmensidad de títulos.
En efecto, las casetas exhiben libros y revistas que apenas cuestan 15 pesos, así como joyas literarias a tan solo 50 y 100 pesos.
La ganga cultural incluye clásicos de la literatura universal y dominicana, así como textos especializados y científicos. Así, se honra el lema del evento: “Hay un libro para cada quien”.
Las voces de los libros. Aunque hubo ayer una asistencia muy escasa al evento, los libreros expresaron su optimismo.
“Deben mejorar las ventas este año, porque hay mucha organización en la feria, y el que va a llegar aquí vendrá a comprar libros, porque no hay tantas cosas chatarras como antes”, dice José García, propietario de “José Libros”.
Su única queja es que, según él, los libreros no están bien representados en la Dirección General de la Feria del Libro. Por lo demás, está muy optimista y conforme con la labor desarrollada por las autoridades culturales.
Otra que augura un gran éxito es Editora Santuario, cuya representante, Oneida González, realza la organización del evento cultural y espera a muchos lectores.
“Ya no hay aparataje de toda esa comida: la feria solo está centrada en libros y solamente en libros”, observa.
Su único reparo son los bonos-libros; estima que deben ser exclusivamente de autores dominicanos.
Ese mismo reparo lo hace Manuel Santana, un escritor y expositor de La Romana que participa en la fiesta cultural.
En tanto, la “Librería Alcántara” ofrece todo tipo de libros nuevos y usados: educativos, jurídicos, históricos, filosóficos, diccionarios y de autoayuda. Su representante, Luis José Solano, espera que “esta feria sea buena y no como años pasados, cuando fue floja”.
Otro que espera lo mismo es Marcos Ramón Ruiz, un comerciante veterano en el mercado de textos nuevos y usados.
Está consciente de que las ventas arrancan lentas y después se incrementan. Por tal razón no abriga grandes expectativas para los primeros días.
“Cada vez que empieza, el proceso es lento; pero a través de su desarrollo, las cosas van mejorando”, dice.
En espera del gran público, Ruiz despliega un bazar literario: clásicos, joyas poéticas y narrativas, y grandes exponentes de las letras nacionales y universales.
Otra participante es la Fundación Juan Bosch. Su gerente comercial, Víctor de la Rosa, refiere que los lectores pueden disfrutar de una gran variedad de libros escritos por el exPresidente de la República y gran literato dominicano.
Mientras tanto, la “Librería Amengual” vende obras y revistas a 15, 50 y 100 pesos, incluidos textos para niños y adultos.