Madrid, 7 oct (EFE).- La auxiliar de enfermería española infectada por el virus de ébola, que ingresó esta madrugada en el Hospital Carlos III de Madrid, evoluciona “favorablemente dentro de las precauciones”.
Así lo dijo hoy en una rueda de prensa el gerente del Hospital La Paz de Madrid, Rafael Pérez-Santamarina, quien añadió que la paciente no quiere que se informe a los medios de comunicación de su estado, por lo que tendrán que preservar su “intimidad”.
La paciente está siendo tratada con suero hiperinmune de un donante anónimo que había sido contagiado por la enfermedad y que tiene anticuerpos.
Así lo anunció en la misma rueda de prensa el jefe de la Unidad de Infecciosas del complejo hospitalario La Paz-Carlos III, José Ramón Arribas, quien añadió que también emplean con la paciente un antiviral que se ha probado en “animales pequeños”.
La mujer, de 40 años, casada y sin hijos, trabajó como voluntaria en el cuidado de los dos misioneros españoles que murieron en Madrid víctimas de ébola, tras haber contraído la enfermedad en África, Miguel Pajares y Manuel García Viejo.
El marido de la auxiliar contagiada, está aislado y bajo vigilancia médica en el mismo hospital, no presenta, por el momento, síntomas de la enfermedad.
También informaron que unas 30 personas que atendieron a los misioneros fallecidos están bajo seguimiento.
En el hospital Carlos III se encuentra aislado otro paciente que llegó a España desde el extranjero como sospechoso de estar infectado, mientras que una enfermera está asimismo aislada y en observación pero no reúne los criterios de sospecha de contagio.
Esta enfermera, que atendió al religioso Manuel García Viejo fallecido en 25 de septiembre, por ahora no es sospechosa de estar contagiada porque no presenta fiebre, sino que ha sido ingresada por precaución al haber tenido diarrea en los últimos días.
El doctor Francisco Arnalich, jefe del servicio de Medicina Interna del centro, precisó que el marido de la enfermera contagiada está “en evolución y en observación”.
En cuanto al varón que llegó a España tras un viaje internacional y que ingresó este lunes en el mismo hospital, dio en un primer análisis un resultado negativo pero permanece en aislamiento con un tratamiento por otra enfermedad.
El médico aseguró que si mañana diera negativo en el segundo análisis se le daría de alta con vigilancia.
También la enfermera ingresada en observación podría ser dada de alta “probablemente mañana”, si la segunda prueba analítica da negativa y quedaría bajo vigilancia, dijo la misma fuente.
