El director ejecutivo de la Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental, Miguel Suazo, indicó que hay que vincular dos ejes centrales para abordar el tema de la corrupción: el cumplimiento de la misión de la institución y el ordenamiento técnico y administrativo transparente de la gestión.
Suazo indicó que “En el caso de salud las consecuencias de la corrupción son dramáticas, en china murieron 92,000 personas por medio de un acto de falsificación de medicamentos”.
“Si ocurre un acto de corrupción en otros sectores hay un daño terrible, hay injusticia, inequidad, pero en el caso de salud la consecuencia directa es la muerte” concluyó.
El Funcionario habló durante en el Ministerio de Salud en un acto en conmemoración del Día Internacional Contra la Corrupción de las Naciones Unidas.
“Las mismas vías que conducen a la corrupción deben ser utilizados a la inversa para combatirlas, es decir hacer que los actos y tareas de los servidores públicos estén basados en un ordenamiento técnico y gerencial adecuado de manera que se conviertan en hábitos y costumbres buenas, eso es el ethos, la ética de la que hablaron los Griegos y las que hoy se expresan en las llamadas éticas aplicadas” señalo Suazo quien es especialista en Éticas Publicas y Bioética.