Moca, República Dominicana
18 de mayo de 2013.-
A: La Junta Directiva de la Asociación para el Desarrollo de la Provincia Espaillat (ADEPE)
Ciudad.-
Al día de hoy, la Asociación para el Desarrollo de la Provincia Espaillat -ADEPE- ha alcanzado algo más de treinta y siete años de existencia. A esa mayoría de edad ha llegado, siendo la institución rectora de los más importantes proyectos de desarrollo y de mayor impacto en la elevación de la calidad de vida de los habitantes de la provincia. Ese rol, ese sitial privilegiado alcanzado, ha sido posible gracias a la visión desarrollista, a lo equilibrado de sus proyectos a corto, mediano y largo plazo, a la racionalidad, y a la continuidad sostenida de los mismos.
Son muchos y diversos los proyectos sociales, económicos y ambientales emprendidos, realizados y en ejecución que impulsa ADEPE. Sobresalen algunos como ejemplares, tal es el caso de la finca experimental, el proyecto de reforestación del río Jamao y la cooperativa COPADEPE. Asimismo, deben cuantificarse en millares los financiamientos y préstamos a pequeños y medianos proyectos de inversión privada, los cuales son generadores de empleos y producción de riquezas materiales en la provincia.
Un hecho poco observado o casi nunca señalado, pero de un valor inmenso es que esa asociación reúne, está dirigida y representa a productores, a personas emprendedoras, de trabajo y generalmente de éxito empresarial en diferentes áreas de la producción. Las huellas (en plural) de ADEPE en el desarrollo provincial y sus municipios en la potenciación y modernización, transferencias de tecnologías productivas y en la elevación de la calidad de vida de las personas, son como diría el profesor aquel: indelebles.
A modo de síntesis, puede identificarse a ADEPE como locomotora del desarrollo productivo, económico, social y humano de los habitantes de esta provincia.
Agréguese algo más: ADEPE, es una institución sin fines de lucro y sus miembros, así como su Junta Directiva realizan un trabajo NO REMUNERADO. Se va a la institución a servir no a buscar. Sólo el equipo técnico, los empleados y personal administrativo reciben una compensación económica acorde con su labor desempeñada.
En tal sentido, puede afirmarse que ADEPE, ha marchado en correspondencia a su visión de “ser una institución líder en el desarrollo de la Provincia Espaillat” y apegada a su misión de “mejorar la calidad de vida de los habitantes, canalizando su desarrollo sostenible e integral”.
Sin embargo, a pesar de ese eficiente desempeño y eficaz liderazgo en el desarrollo de nuestra provincia, ADEPE no puede ignorar el malsano propósito de un grupo de personas que desde hace algún tiempo viene trabajando con muy buena auto-asignada remuneración en un supuesto plan de desarrollo de la provincia y cuyo único objeto es, no desarrollar la provincia, sino desarrollar sus cuentas particulares mediante la recepción de fondos gubernamentales, de proyectos e instituciones extranjeras y otras fuentes.
Ese grupito de personas encabezadas por el embaucador principal, ha logrado hacerle creer a algunos ingenuos y tontos, que ellos encarnan el desarrollo de la provincia. Como avivatos y buscavidas, todo cuanto ha hecho el gobierno o inversores privados en la provincia o el municipio, ellos dicen que eso era una meta de desarrollo de su plan y por lo tanto, es su objetivo materializado. Eso afirmaron en el caso de la construcción de la carretera Moca-La Vega hace ya un tiempo. Lo mismo dijeron de la construcción de las calles de Guanábano, en el caso de la construcción del hospital de Villa Trina, lo dicen hoy acerca de la reconstrucción y repavimentación de las calles de la ciudad de Moca y hasta se atrevieron a expresar que la construcción de la Plaza Sunrise era una meta de desarrollo de su Plan. ¡Qué bárbaros!
Sin embargo, si se revisa la lista de metas no priorizadas e incongruentes que ellos levantan, se verá claramente que ninguno de esos objetivos estaban en ese amasijo de disparates que, además, califican de estratégico; y aun hubiesen estado, tampoco ellos hicieron nada por lograrlo. Como se comprenderá tampoco depende de ellos que el gobierno o inversionistas privados realicen ninguna obra dentro de la provincia.
Lo que sí está claro en estos “planificadores” y “estrategas del desarrollo”, es la ambición desmedida y la voracidad económica que los mueve. Lo sucedido recientemente por la instalación de unos módulo solares en una zona rural y la falta de transparencia en ese proyecto, ilustra adecuadamente en torno a qué propósitos mueven a estos “desarrollistas”.
Es necesario que los miembros de ADEPE y sus directivos reflexionen acerca del papel desempeñado por esta institución en el desarrollo provincial a lo largo de estos treinta y siete años, de la condición de hombres y mujeres de trabajo que la integran, para que ahora no permitan que un vivo y sus acompañantes pretendan arrebatarle un liderazgo forjado durante décadas, sin otra aspiración que el desarrollo de la provincia. Así se verá, que ni el embaucador principal ni algunas de las personas que le acompaña han tenido nunca una gallina ponedora, un pollo que hayan criado, un puerco que hayan engordado, una vaca que hayan ordeñado o un conuquito que hayan sembrado. Ni pensar siquiera en que hubiesen puesto un block de cemento o hayan tenido una máquina industrial o agrícola dentro de un proceso productivo ni siquiera en pequeña escala. Nunca han elaborado ni siquiera palomitas de maíz.
Se verá también la necesidad de que los grupos financieros y la banca comercial revisen su cartera de ayuda a instituciones de desarrollo para que puedan identificar con precisión el destino de sus ayudas y colaboraciones dirigirlas realmente a las instituciones de prestigio, de tradición, transparentes y de real vocación de desarrollo a favor de la colectividad.
Son ustedes los héroes de la producción, quienes sufren en los momentos de sacrificio cuando las cosas no andan muy bien (gran parte de las veces) y son quienes van al banco a hacer transacciones comerciales y financieras, a guardar los merecidos beneficios de la misma o a solicitar el necesario préstamo para el financiamiento de la producción. Horroriza saber que instituciones financieras que se enriquecen con el beneficio del trabajo de ustedes, ayuden a estos embaucadores con donaciones para el montaje de sus actos cantinflescos, cuando regatean las mismas o menores cantidades en préstamo a algunos productores carentes de la garantía necesaria para dicho financiamiento.
Un hecho extrañamente inexplicable (en apariencia) es la preferencia permanente por ir a hoteles de lujo y bien lejanos a la provincia a “discutir” problemas supuestamente atinentes al desarrollo de la provincia, desechando la abundante cantidad de locales disponibles en el municipio de Moca, útiles y que sin ningún costo se pueden conseguir para realizar esos eventos. En la agenda particular de ese embaucador y acompañantes está el objetivo de su desarrollo económico y acumulación de riquezas, pero nunca estará como meta el desarrollo de la provincia.
Si piensan que exagero bastaría señalar que ningún directivo de ADEPE recibe salario por su trabajo en esta institución, que de por sí, es bastante autosustentable y que tiene una solidez económica propia expresada en números grandes. En contraste con esto, el embaucador principal del Estratégico Plan para Embaucar a los Pendejos de la Provincia Espaillat recibe del mismo un salario no igualado por ningún empleado privado o estatal en la provincia, tiene vehículos de lujo asignados, chofer y combustible pagados. Y esto es solo el inicio. La aspiración grande está en la administración de proyectos que puedan captar para su manejo, bajo el pretexto de servir a la población, de manera que, ni la borona que se desprende de unos contratos legales para instalación de módulos solares, la dejó caer a un abogado y comunicador, que era parte del grupo y prefirió sacarlo del equipo para que no se beneficiara de dichos contratos y quedarse él con la carne del cordero y hasta con el cuero del cordero.
Si creen que dramatizo en la valoración de ese embaucador, bastaría recordarles que solo hace algunas semanas estuvo en la Casa Grande del Ejecutivo en la capital, se hizo acompañar de un sacerdote de elevado rango de puesto en la ciudad de Santiago, vendiendo la imagen de ser representante de la provincia. Un detalle que refleja la deslealtad y ambición de ese sujeto, es que ni siquiera el representante de la provincia en el congreso, a decir, de algunos sectores de la sociedad, se enteró que se realizaría ese encuentro. Se fue solo y a espaldas del que siempre lo ayudó; a esta situación se suma, la voz populi, que dice que hasta el regente del pueblo de Moca, le renunció por su inconformidad de como ese sujeto manipula las cosas a título personal.
Por su tradición de trabajo, por la solidez alcanzada, por la seriedad con que se ha manejado a lo largo de estos treinta y siete años de vida ininterrumpida y en ascenso, ADEPE es el mejor interlocutor válido entre la provincia y las autoridades del gobierno central para canalizar recursos, programas de ayuda, estímulo a la producción y en sentido general cualquier asunto que impacte favorablemente en la productividad y mejora de vida de los habitantes de esta provincia. Lo es igualmente para ejecutar programas de ayuda o financiamiento de organismos internacionales que tiendan a beneficiar la producción o a los habitantes de este trozo de tierra.
Invito formalmente a la Junta Directiva de esa institución y a todos sus miembros a reflexionar con este Llamado a la Conciencia (como decía el hermano Pablo) para que tomen cuantas medidas tengan que tomar para impedir que el liderazgo obtenido en buena lid y durante largas primaveras de trabajo, les sea arrebatado impunemente por un arribista y ambicioso sujeto.
Esto debe hacerse por el bien de la provincia.
Con admiración y estima,
Dr. Carlos Pérez