Para poder realizar el análisis, las pacientes necesitarían utilizar EVA entre 60 y 90 minutos a la semana.
El estudiante mexicano Julián Ríos Cantú ganó este fin de semana el concurso Global Student Entrepreneur Awards (GSEA), en Alemania, por el diseño de un sostén que a través de sensores puede ayudar en la detección temprana del cáncer de mama.
El proyecto que presentó Ríos Cantú fue un sostén de biosensores llamado EVA, respaldado por su empresa Higia Technologies, fundada con otro compañero, ubicada en el estado de Nuevo León.
Funciona a través de sensores y resulta menos agresivo y doloroso que las mamografías.
La madre de Julián, sufrió la amputación de los dos senos y estuvo a punto de perder la vida, lo que inspiró al joven para crear un aparato que ayudará de alguna forma a las mujeres que padecen la enfermedad.
Por ello, hace un año, junto con cuatro compañeros empezó a desarrollar una solución que pudiera ser más certera que la autoexploración y menos agresiva y dolorosa que las mamografías que se practican actualmente que, de acuerdo con la National Breast Cancer Foundation y un estudio publicado en el British Medical Journal, por su radiación y la compresión de los senos pueden provocar la propagación de células cancerígenas a otras partes del cuerpo.
“EVA es una red de biosensores que va sobre el seno de la mujer, toma los datos de temperatura los analiza y a partir de ahí envía información a una aplicación o a cualquier computadora. En cuanto hay una malformación del seno o un tumor, hay un exceso de vascularización, entonces a mayor sangre, mayor flujo de temperatura”, explicó Ríos Cantú, estudiante de Ingeniería.
Para poder realizar el análisis, las pacientes necesitarían utilizar EVA entre 60 y 90 minutos a la semana.
Fuente: Infobae