El pleno de la Junta Central Electoral (JCE) afirmó ayer que para las elecciones de 2020 no serán utilizadas las tabletas capta huellas implementadas en las votaciones de 2016, debido a un desempeño inconsistente y poco fiable.
Además, el pleno indicó que se volverán a utilizar los escáneres que resultaron mejores para los procesos electorales de 2008, 2010 y 2012, usados para la transmisión de resultados.
La decisión fue tomada debido a las experiencias con los equipos de la empresa Indra Sistemas, utilizados por secretarios, presidentes, primeros y segundos vocales de por lo menos cien juntas electorales en el territorio nacional.
También se tomó en cuenta posibles modificaciones de los escáneres instalados para la lectura de las boletas electorales en las mesas de votación, como baterías nuevas y un nuevo software que mejore su uso.
El pleno agregó que esa institución pondrá su empeño en educar a las personas que trabajarán en los Colegios Electorales del país, mediante una formación en cursos presenciales y a tráves de la modalidad en línea.
La comisión de asesores informáticos está integrada por los encargados de tecnología de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), del Instituto Tecnológico de las Américas (ITLA), el Banco Popular Dominicano y la Cervecería Nacional Dominicana (Grupo León Jimenes).
Insatisfacción
El presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Julio César Castaños Guzmán, había dicho que el día de las elecciones los resultados de los equipos electrónicos que se compraron no fueron los esperados, y por lo tanto en la JCE había una insatisfacción.
Castaños Guzmán ha insistido en que esos equipos no funcionaron a cabalidad en las elecciones generales, razón por la cual no están en la obligación de pagar en su totalidad la suma acordada.
“Nadie podrá ponerles directrices a esta institución”, había aseverado.
EL COSTO DE LOS EQUIPOS DE LA JUNTA
El informe, enviado a los medios a través del Departamento de Comunicaciones de la JCE, dice que los equipos de registros de concurrentes en el escrutinio de los votos, tuvieron un costo de 39.7 millones de dólares. Expresó que esa entidad no tiene los US$13.9 millones que reclama la empresa Indra, como completivo de la compra de los equipos tecnológicos para las elecciones de 2016. De igual forma, debido al cuestionamiento que este informe produjo, el presidente de la JCE había aclarado que tal situación no afectaba la credibilidad de los resultados de las elecciones pasadas.