El presidente iraní, Hasan Rohaní, criticó ayer con dureza a su homólogo estadounidense, Donald Trump, y dejó claro que no aceptará una renegociación del pacto nuclear con Teherán, que Washington amenaza con abandonar.
“Este acuerdo es algo que nadie pueda tocar. Si se quita un ladrillo, todo el edificio se viene abajo”, aseguró Rohaní tras intervenir ante la Asamblea General de la ONU.
El futuro del pacto nuclear, firmado en 2015 entre seis potencias internacionales e Irán tras años de negociaciones, está en el aire por los recelos que despierta para la nueva Administración estadounidense.
Trump, que ayer lo calificó como una “vergüenza” para su país, aseguró hoy que ya ha tomado una decisión sobre la continuidad de EE.UU. en el acuerdo, pero no quiso revelar cuál es.
Su secretario de Estado, Rex Tillerson, había revelado horas antes que la intención es “renegociar” el pacto con Irán para corregir sus “defectos”. Rohaní, sin embargo, cerró ayer de un portazo esa opción y zanjó: “No habrá cambios”. En su discurso ante los líderes mundiales, el presidente iraní afirmó que su país nunca será el primero en violar o romper ese pacto internacional, pero dijo que responderá “decididamente” si cualquier otra parte lo hace. Rohaní, que defendió las bondades del acuerdo, consideró que sería “una pena” si éste es destruido por “parias recién llegados a la política internacional”, en referencia a Trump.