SANTO DOMINGO. Investigadores de las universidades Autónoma de Santo Domingo (UASD) y de Puerto Rico (UPR) externaron su preocupación por los hallazgos de un estudio que desarrollan en las playas de la costa este del país en las que observaron una erosión continua, aumento en la temperatura del agua e irrespeto a los 60 metros de franja de línea costera marina.
Para la investigación, hicieron un levantamiento de las infraestructuras localizadas a lo largo de 64.8 kilómetros lineales de costa, desde Uvero Alto hasta Juanillo. El maestro Luis Almánzar informó que se determinó que las zonas con mayor porcentaje de inmuebles dentro de la franja de 60 metros fueron Cortecito con 62 %, Uvero Alto con 45 % y Punta Cana con 37 %.
Durante la noche del martes y la mañana de ayer, los investigadores de la UASD: Gladys Rosado, Yira Rodríguez y Almánzar; y de la UPR: Rafael Méndez-Tejeda y Maritza Barreto, presentaron resultados preliminares del estudio en el foro Variabilidad climática y geomorfológica en el tramo costero desde playas Uvero Alto hasta Juanillo, celebrado en la sede de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode).
“Las acciones humanas en o próximo a la zona litoral del tramo Uvero Alto-Juanillo han impactado sobre el medio físico, intensificando la acción erosiva”, expresó el profesor Almánzar.
Alertó de que el desarrollo poco planificado ha contribuido a incrementar los niveles de vulnerabilidad del ecosistema de playa, potencializando los efectos del cambio climático y disminuyendo la capacidad de amortiguamiento de los ecosistemas adyacentes.
Recomendó velar por la aplicación de la legislación que regula el uso del espacio costero próximo a la orilla marina y procurar la eliminación del tránsito vehicular cerca de la franja arenosa.
El impacto económico
El impacto económico
La bióloga Gladys Rosado, quien lidera el estudio que se ejecuta desde 2014, destacó que el sector turístico representa para el país el 40 % de su PIB. “Por lo que cuidar la zona costera es de alta prioridad debido a que más del 90 % de este depende del uso de las playas y otros ecosistemas costeros”, dijo. Aseguró que la República Dominicana dejará de recibir US$100 millones en los últimos 10 años por causa de la erosión de las playas, que -estimó- pierden 0.5 metros/año.
Durante el foro, el climatólogo Méndez-Tejeda hizo hincapie en la necesidad de que las autoridades equipen al personal meteorológico.