El ministerio de Salud Pública y el Servicio Nacional de Salud (SNS) anunciaron la intervención del hospital Jaime Mota de Barahona, donde la pasada semana murieron siete neonatales.
El anuncio fue hecho en conjunto por la ministra Altagracia Guzmán Marcelino y el director del SNS, Chanel Rosa Chupany, tras dar a conocer los resultados de la investigación realizada por técnicos en el hospital.
El informe indica que se determinó que hubo baja aplicación de los protocolos neonatales oficializados por el Ministerio de Salud; también se encontraron debilidades en el laboratorio clínico y en el departamento de imágenes; no se encontró evidencia de la presencia de médicos especialistas durante las 24 y que los informes de los niños fallecidos fueron escritos por las enfermeras y no por los médicos, como corresponde.
También se encontró que no se cumplen con las normas de bioseguridad y en los expedientes clínicos no se utilizan las herramientas básicas de atención materna-neonatal.
Se determinó que cinco de los siete fallecimientos se produjeron por rupturas prematuras de membranas, por prematuridad y bajo peso, por lo que determinaron la intervención con la presencia constante de técnicos del SNS en el hospital, se van a designar médicos especialistas, sobre todo, que residan en la zona; la capacitación del personal de salud en aspecto como reanimación avanzada, bioseguridad y protocolo entre otras acciones.