París. La catedral de Notre Dame de París, uno de los monumentos más emblemáticos de la capital francesa y símbolo de la historia del país, fue afectada ayer por un incendio de grandes proporciones.
Las imágenes mostraban cómo las llamas comenzaron afectando el techo, construido sobre todo en madera, y cuyas dos terceras partes quedaron consumidas por el fuego iniciado a las 18:50 hora local.
Un gran despliegue de bomberos trata de controlar las llamas, que salen sobre todo de la aguja central del templo, que es visitado por miles de personas cada día, y que finalmente se desplomó en medio de las llamas.
Se informó que el incendio puede estar ligado a las obras que se están efectuando en el tejado de la capital.
Notre Dame es el monumento más visitado de Francia, con 13 millones de personas al año, y símbolo de la historia del país en momentos clave.
Notre Dame es, junto a la torre Eiffel, uno de los grandes atractivos de la ciudad y una de las obras maestras del arte gótico con más de 800 años de historia.
Durante un tiempo fue el edificio cristiano más grande del mundo occidental y símbolo de la riqueza y de la potencia de la capital.
El mundo se conmociona
El incendio ha conmocionado al mundo, que no cesa de lamentar con estupor el suceso acaecido a un templo símbolo de París, de Francia, su historia y del mundo católico.
Las iglesias cristianas en Tierra Santa manifestaron que rezan por la catedral y expresaron su “solidaridad con la Iglesia en Francia, especialmente durante la Semana Santa”, y el Vaticano ha recibido con “incredulidad y tristeza” la noticia del “terrible” incendio.
UNESCO ofrece ayuda
La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, mostró su “inmensa emoción” por el incendio, al tiempo que ofreció el apoyo de su institución para su restauración.
“La Unesco sigue de cerca la situación y está al lado de Francia para salvaguardar y rehabilitar este patrimonio inestimable”, escribió en su cuenta de Twitter Azoulay, antigua ministra francesa de Cultura.