La imputación de 14 personas, entre ellas un ministro y el presidente del principal partido de oposición dominicana, por los sobornos pagados por la constructora Odebrecht, pone en evidencia un entramado de corrupción en la clase política del país, sacudida esta semana por este escándalo.
El caso afecta tanto al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que dirige el tres veces expresidente del país Leonel Fernández, como al Partido Revolucionario Moderno (PRM, principal de la oposición ), cuyo presidente, Andrés Bautista, expresidente del Senado, se encuentra detenido junto a otras nueve personas.
Hasta el momento, ni Fernández ni el presidente del país, Danilo Medina, se han pronunciado sobre las detenciones de los imputados, quienes niegan haber recibido sobornos de parte de Odebrecht.
El ministro bajo arresto es el de Industria y Comercio, Temístocles Montás, quien, aunque el pasado lunes puso su cargo a disposición de Medina, no ha sido sustituido.
El procurador dominicano, Jean Alain Rodríguez, anunció el lunes la imputación de 14 personas por el caso de Odebrecht, que aseguró haber pagado 92 millones de dólares en el país en concepto de sobornos para acceder a obras públicas entre 2001 y 2014.
Al grupo se le acusa de los delitos de sobornos, asociación de malhechores, prevaricación, desfalco, enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
Según extractos del expediente presentado por el Ministerio Público y divulgados por medios locales, los imputados lograron acumular millonarias fortunas durante estos años, supuestamente gracias a los sobornos que recibían del empresario Ángel Rondón, representante comercial de Odebrecht en República Dominicana, señalado como la persona que recibía y distribuía el dinero.
Los recursos eran entregados, presuntamente, a funcionarios y legisladores para agilizar proyectos y financiación a favor de la multinacional, de acuerdo con la acusación, un delito que, según dijo hoy a Efe el presidente de la a Alianza Dominicana Contra la Corrupción (Adocco), Julio Cesar de la Rosa, “representará un antes y un después en materia de combate a la corrupción” en el país.
Estos supuestos delitos “ponen de manifiesto una falta de control total por parte de instituciones como el Congreso Nacional, la Contraloría General de la República y la Cámara de Cuentas”, señaló.
“Estas dependencias debieron estar atentas a las declaraciones juradas de bienes de los funcionarios y no lo hicieron. La debilidad institucional ha contribuido con esto”, afirmó.
Desde el lunes están bajo arresto el presidente del PRM, así como el ministro de Industria y Comercio, un exministro de Obras Públicas, varios exfuncionarios, un abogado y un exdiputado del otrora mayoritario Partido Revolucionario Dominicano (PRD), del que surgió en 2014 el PRM.
Montás dijo este viernes que “nunca” fue sobornado por la constructora brasileña, pero admitió que recibió fondos para campañas electorales del PLD de varios empresarios, entre ellos Ángel Rondón, aunque afirmó que “en ninguno de esos casos se me dijo que ese era un aporte de Odebrecht ni mucho menos que se esperaba contrapartida alguna”.
Mientras, el presidente del PRM aseguró que “jamás” ha recibido o aceptado dinero o cualquier tipo de recompensa para favorecer a Odebretch.
También están imputados dos senadores del PLD y un diputado del PRM, pero no han sido detenidos a la espera de que sus respectivas cámaras decidan sobre la solicitud de retiro de inmunidad parlamentaria presentada por el procurador general.
Todos se encuentran en el Palacio de Justicia del Distrito Nacional, convertido esta semana en el lugar obligatorio de peregrinación de los políticos locales, quienes han ido en fila a solidarizarse con sus compañeros de partido o para negar la vinculación de estos con el escándalo.
Los detenidos están a la espera de que el juez conozca la solicitud de medida de coerción en su contra, en una audiencia que se reanudará el próximo martes tras ser aplazada el miércoles para que los abogados de los involucrados puedan acceder a las copias del expediente acusatorio formulado por el Ministerio Público.
Las detenciones se produjeron poco después de que República Dominicana recibiera de Brasil datos sobre los sobornos pagados por Odebrecht en el país, gracias a un acuerdo entre el Ministerio Público y la multinacional, que deberá pagar 184 millones de dólares, el doble de lo que entregó en sobornos.
Con este acuerdo, Odebrecht se comprometió a revelar los nombres de los beneficiados a cambio de que sus empleados no sean enjuiciados en ese país caribeño. EFE