La arquidiócesis de Santo Domingo suspendió del ejercicio del Ministerio Sacerdotal al padre Elvin Taveras Durán, acusado de la muerte de un adolescente.
“Establecemos la medida cautelar de retirar del ejercicio del Ministerio Sacerdotal (suspensión “Ad Divini” Canon 1395) al padre Elvin Taveras Durán”, sostiene.
La arquidiócesis emitió anoche un comunicado en el que manifiesta su disposición de colaborar con las investigaciones del caso y el proceso judicial que se derive del mismo.
“Pedimos a las autoridades que, basados en la verdad de los hechos, apliquen las sanciones previstas en el Código penal”, señaló.
Continúa diciendo que “acompañamos en su dolor a la familia Carrión Saviñón, a la cual le expresamos nuestra cercanía, les pedimos perdón y les aseguramos nuestras oraciones”.
La arquidiócesis de Santo Domingo invitó a todas las parroquias, comunidades, movimientos e instituciones católicas a unirse en oración permanente por la víctima, sus familiares y los feligreses de las parroquias Santa Cecilia y Nuestra Señora de Fátima.
“Imploramos del Señor la fuerza para seguir sirviendo al pueblo de Dios”, concluye el comunicado distribuido a través de la Comisión de Comunicaciones de la Arquidiócesis de Santo Domingo.
El sepelio
Fernelis Carrión Saviñón ya no podrá bailar más hip hop junto a sus amigos, en la academia de música de la que era uno de sus facilitadores. Sus restos fueron sepultados ayer en el cementerio municipal de Villa Mella, Santo Domingo Norte, ante reclamos de justicia por su asesinato a martillazos a manos, supuestamente, del sacerdote Elvin Taveras. En medio de una caravana de jóvenes en motocicletas y pasolas, con botellas de cerveza en las manos, dieron el último adiós al “bailarín”, como era conocido Carrión Saviñón entre sus amigos y allegados.
Fernelis, quien también era monaguillo en la misma parroquia en que Taveras era cura, estaba desaparecido desde el pasado viernes y fue ayer cuando se encontró su cadáver cerca de Sabana Grande de Boyá, en la carretera que comunica a Villa Mella con la provincia Monte Plata.
Víctor Saviñón, tío materno del joven de 16 años, no salía de la sorpresa que le causó ver salir a dos sacerdotes del destacamento Felicidad, en el sector Los Mina, donde estaba preso el acusado, después de permanecer por más de dos horas conversando con oficiales a puerta cerrada.