Sugiere al Ministerio Público prosiga investigaciones casos denunciados para que prevalezca la verdad.
La Iglesia Católica de la República Dominicana, pidió perdón ayer a los hijos de las familias de la Iglesia, a la sociedad y al pueblo por las ofensas que han sufrido por el mal ejemplo de sacerdotes y jerarcas involucrados en abusos de menores.
Asimismo, pidió al Ministerio Público que prosiga las investigaciones de los casos denunciados para que prevalezca la verdad y se actúe según lo dictado por la Ley.
La postura de la iglesia está contenida en un documento remitido a LA INFORMACION, por el Arzobispado de Santiago, que dirige monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio.
“Pedimos perdón a las personas afectadas, a sus familiares, a la sociedad y al pueblo sencillo por las veces que con el mal ejemplo, lo hemos ofendido”, agregó la nota.
Igualmente, lamentó la falta de un testimonio coherente,
como servidores de Jesucristo de los que representantes de la Iglesia vinculados a los casos de pederastias.
“Ante los casos traídos por distintos medios en donde se han visto envueltos hijos de la familia de la Iglesia nos remitimos a las declaraciones hechas por el Arzobispado de Santiago y de Monseñor Antonio Camilo González, Obispo de La Vega”, destaca el documento.
Y, ciertamente, las declaraciones coincidentes de ambos obispos se expresan en torno a la presentación de perd٠n por los daños a la familia de la iglesia.
Ayer, monseñor Agripino Núñez Collado, rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), reveló que el nuncio apostólico Józef Wesolowski fue retirado del país por orden del papa Francisco, tras salir a la luz pública el informe que lo relaciona con ultrajar a 7 menores en su casa de campo en la comunidad de Juan Dolio, en la Romana.
Reveló que el Vaticano ha iniciado una investigación y por tratarse de un embajador y una figura dentro del orden eclesiástico su situación debe ser tratada de gobierno a gobierno, al tiempo que dijo que pudo haber sido el Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, quien envió el informe al Vaticano.
Núñez Collado estimó de “imperdonable” los casos que están saliendo a la luz pública de sacerdotes pederastas, y manifestó que los mismos trastornan a la Iglesia Católica, indicando que si se comprueba esa vejación “no cabe dudas, que la Santa Sede les dará un castigo ejemplar”.