CARACAS. La Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) señaló hoy que la crisis económica, sanitaria y migratoria por la que pasa el país desde hace meses “deslegitima” la convocatoria a las elecciones presidenciales del 20 de mayo y defendió que es “urgente” que se retrasen hasta el último trimestre del año.
“Ante problemas humanos de tal magnitud, se deslegitima la realización de las elecciones presidenciales, convocadas para el próximo 20 de mayo”, sostuvo la CEV en un comunicado que difundió este lunes.
Los obispos venezolanos señalan que desde enero la
“hiperinflación ha acrecentado el empobrecimiento general de la población” lo que se suma a la “carencia generalizada de los servicios públicos”.
“Todo ello ante la sorprendente indiferencia de los responsables gubernamentales de estas áreas para solventar estos problemas”, añadieron.
A este punto “se suma el aumento de la insalubridad por la aparición incontrolable de epidemias y de enfermedades en las poblaciones más vulnerables” mientras existe una “carencia de medicamentos para los tratamientos”.
Además “la emigración está tomando cada día mayores proporciones (…) afecta a todos los niveles sociales” y “se realiza en condiciones cada vez más precarias”.
En el documento, los obispos hacen un “apremiante llamado” a los “gobernantes y responsables” de Venezuela a “tomar conciencia de su responsabilidad en todos estos males, a escuchar al pueblo y a abocarse, sin más dilación (…) a facilitar la búsqueda de soluciones políticas que detengan estos males”.
Todo ello antes de que estos problemas “alcancen proporciones incontrolables y cotas dolorosas de destrucción y muerte”.
La CEV sostuvo que la convocatoria electoral de mayo “tal como está concebida (…) lejos de aportar una solución a la crisis que vive el país, puede agravarla y conducirlo a una catástrofe humanitaria sin precedentes”.
Los religiosos defienden que para el sufragio de finales del mes que viene no existen “las suficientes garantías que identifican todo proceso electoral libre, confiable, transparente”.
Este fue uno de los principales motivos que llevaron a la principal alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a no presentar candidato para unas elecciones que tampoco son reconocidas por varios países latinoamericanos y Estados Unidos, entre otros.
Para los comicios a la jefatura de Estado aspiran el actual presidente, Nicolás Maduro, el exgobernador del estado Lara Henri Falcón, el que fuera pastor religioso Javier Bertucci, el empresario Luis Alejandro Ratti y el ingeniero Reinaldo Quijada.