“Mujer, he ahí tu hijo. Hijo, he ahí tu madre” con estas, las terceras del sermón de las siete palabras, el Monseñor Francisco Ozoria Acosta invitó a los cristianos a reconocer la maternidad de la virgen María e imitar sus acciones.
“Todos nosotros, los discípulos de Jesús, tenemos que reconocer esa maternidad de María y sentirnos amados y cuidados por ella como sus hijos”, expresó durante su intervención.
Ozoria Acosta llamó a una contemplación de estas palabras en doble vía, una primera vía de una acción de la madre al hijo y una segunda del hijo a la madre.
El monseñor resaltó que el mejor regalo de Jesús para la humanidad, lo hizo en la cruz al “entregarnos a su madre”.
Asimismo, reiteró a los feligreses que “Acoger a María como madre nos conducirá a ser como ella, a imitarla en su sensibilidad ante los problemas y las necesidades de los demás”.
Palabras anteriores
En la primera palabra del sermón: “Padre, perdónalos que saben lo que hacen”, recitada por monseñor José Amable Durán Tinero, la Iglesia católica criticó el aborto, los abusos sexuales contra adolescentes y las mujeres asesinadas.
En la segunda palabra del Sermón de las Siete Palabras, monseñor Faustino Burgos Brisman pidió a no rechazar a los trabajadores informales nacionales o extanjeros quienes buscan oportunidades de integración en la sociedad.
Como parte del sermón “Hoy mismo estarás conmigo en el paraíso”, dijo que estos trabajadores, que son incluso jóvenes recien salidos de la universidad, son quienes realizan lo que se suele denominar “el trabajo de las tres dimensiones: peligro, sucio y degradante”.