PUERTO PLATA.-“El hospital Ricardo Limardo de Puerto Plata sigue de mal en peor, ya que además de no existir las condiciones dignas en su planta física que lleva tres años en remodelación, también se están muriendo muchos paciente debido a la falta de equipos, medicinas e insumos”.
Esa aseveración fue realizada por el presidente de la filial en la provincia Puerto Plata del Colegio Médico Dominicano (CMD), doctor Johnny Rafael Tavárez Capellán, quien reiteró su denuncia al asegurar que en el hospital Ricardo Limardo se muere una gran cantidad no cuantificada de pacientes por falta de equipos y medicamentos, así como por mala alimentación.
Tavárez Capellán emitió sus declaraciones al participar en el acto de reconocimiento a nueve médicos de Puerto Plata que fue realizado por el consorcio de Farmacias Popular, donde aclaró que aprovechó el escenario para clamar de la unión de todos los sectores sociales de la provincia para lograr que el gobierno central acuda en rescate del principal centro de salud del Estado en la región.
El dirigente gremial sostuvo que los ciudadanos que aciden al hospital Ricardo Limardo de Puerto Plata solo encuentra allí la buena voluntad de los médicos y las enfermeras, debido a que el Ministerio de Salud no suple de medicinas e insumos dicho centro asistencial donde además intervienen otros factores que ocasionan muchas muertes a pacientes.
“En varias ocasiones hemos denunciado que cada semana mueren muchos pacientes debido a que en nuestro hospital construido durante la dictadura de Trujillo no hay ni siquiera una jeringa y eso no solo ocurre en Puerto Plata, sino que acontece en la mayoría de los centros hospitalarios del país, por lo que si esos pacientes hubiesen sido atendidos en lugares con equipos adecuados, abundante medicinas y buena alimentación, estoy seguro que muy pocas de esas personas hubieran fallecido”, sostuvo el médico neumólogo.
En ese mismo tenor, precisó que de los pacientes fallecidos en el hospital Ricardo Limardo, de un 15 a un 20% de los perecidos se debe a la carencia de equipos, medicinas y mala alimentación, pero además muchos enfermos recuperables, especialmente los que llegan con traumas craneoencefálicos que necesitan ventilación mecánica para estabilizarlos, la mayoría se muere por falta de esa tecnología.