Amnistía Internacional lanza un llamamiento mundial para la protección de los miembros de la organización de derechos humanos COFADEH como parte de su campaña Escribe por los Derechos.
El Comité de Familiares de los Desaparecidos en Honduras (COFADEH) es una de las principales organizaciones de derechos humanos del país, dedicada a la investigación de abusos contra los derechos humanos y a la búsqueda de justicia para las víctimas. Se ocupa no sólo de los casos de personas que desaparecieron durante los años 80, sino también de casos actuales. Este trabajo les ha llevado a ser blanco de amenazas y ataques a lo largo de los años.
Como parte de la campaña Escribe por los Derechos, Amnistía Internacional le pide al gobierno hondureño que reconozca el indispensable trabajo llegado a cabo por COFADEH en defensa de los derechos humanos, apoye a la organización y condene los ataques contra ella.
Escribe por los Derechos es una de las principales campañas de Amnistía Internacional, que moviliza a cientos de miles de personas en todo el mundo para cambiar la vida de personas en riesgo a través del simple acto de enviar una carta.
Del 6 al 17 diciembre, personas de más de 80 países de todo el mundo harán campaña a favor de individuos y comunidades que sufren abusos contra los derechos humanos. Amnistía Internacional espera que más de dos millones de cartas, correos electrónicos, mensajes de twitter y telefónicos se envien en el transcurso de la campaña.
Dichos mensajes irán destinados tanto a mostrar solidaridad con las personas en situación de riesgo como a presionar a las autoridades para que protejan sus derechos humanos.
Pueden saber más acerca del caso de COFADEH en el artículo que adjuntamos a continuación. Este artículo fue publicado a principios de noviembre en la revista de Amnistía Internacional Wire. Puede ser libremente publicado por los medios de comunicación. Existe material audiovisual complementario sobre el caso que podemos proporcionarles.
Para conocer más acerca de Escribe por los Derechos o del caso de COFADEH, por favor, póngase en contacto con:
Juan I. Cortés – Oficina de Prensa de Amnistía Internacional
Mail: Juan.Cortes@amnesty.org
Tel: + 44 (0) 20 3036 5801
Móvil: +44 (0) 7956 612 329
“No pueden contarnos las alas”
Por más de 30 años, un grupo de de defensoras y defensores de los derechos humanos ha sido una liz de esperanza para aquellas personas que han visto sus derechos vulnerados.
Ebed Yánez, de 15 años, dejó su casa en Tegucigalpa tarde en la noche del 26 de Mayo de 2012, sin decirle a sus padres. Iba manejando, sin licencia, la motocicleta de su papá camino a encontrarse con una joven. Salir de noche en la capital hondureña puede ser peligroso. Ebed nunca volvió a casa.
Al día siguiente, sus preocupados padres lo buscaban en todas partes, hasta que lo encontraron yaciendo en la morgue. Había sido asesinado a balazos.
Wilfredo Yánez, el padre de Ebed, quería justicia para su hijo. Siguió pistas y recolectó evidencia, poniendo su propia vida en riesgo. Algunos días después, descubrió que unos soldados habían disparado a Ebed luego que él no se detuviera en un punto de control del ejército.
Wilfedo denunció el hecho a la Fiscalía, pero no tuvo muchas esperanzas que esta instancia pudiera ayudarle. Después del golpe militar de 2009, las instituciones del Estado estaban más debilitadas que nunca y la ya precaria situación de los derechos humanos se había deteriorado todavía más.
De acuerdo con estadísticas de la ONU, Honduras tiene la tasa de homicidios más alta del mundo, sólo un 20% de los casos son investigados. Es uno de los países más pobres de las Américas, con 60% de su población viviendo en pobreza.
La policía es notoriamente corrupta, y suele estar vinculada con el crimen organizado. En la medida que los carteles de la droga han expandido su alcance, las autoridades han respondido poniendo más soldados en las calles del país.
Por esto, como la mayoría de las víctimas de violaciones a los derechos humanos en Honduras, Wilfredo también se acercó al Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras para que lo ayudaran.
Cercanos al peligro
Luchar por los derechos humanos en Honduras puede ser peligro. Periodistas, abogados, sindicalistas, líderes indígenas y campesinos, han sido asesinados por su trabajo defendiendo los derechos humanos.
Las y los activistas de COFADEH han recibido mensajes de texto amenazándoles con violencia sexual y han sido atacados físicamente. Sus oficinas han sido asaltadas en numerosas ocasiones. Pero nada de esto ha evitado que sigan promoviendo y defendiendo los derechos humanos en Honduras por más de 30 años.
La organización fue fundada en 1982 por familiares de activistas políticos, líderes estudiantiles o sindicalistas que fueron “desaparecidos” por las fuerzas de seguridad durante los gobiernos militares anteriores.
Desde entonces, han seguido recopilando testimonios de las víctimas, protegiendo a las personas en riesgo y apoyando a aquellos que, como Wilfredo, están buscando justicia.
Asesinado en un viaje de pesca
Visitar la oficina de COFADEH en el centro de Tegucigalpa es una experiencia memorable. Las personas esperan pacientemente para contar sus historias a los abogados, esperando que puedan ayudarles. Muchos viajan de muy lejos para llegar hasta allí.
Muchas víctimas de abusos a sus derechos humanos con las que hablamos nos dijeron que no denunciaban los crímenes a las autoridades porque no confían en ellos y tienen temor. Prefieren iniciar un caso en COFADEH, que luego se los pasa a la Fiscalía.
En la más reciente visita de Amnistía en mayo de 2013, nos reunimos con Wilmer Sabillón, un hombre joven. Hacía pocas semanas que un oficial de la Marina le había disparado durante un viaje de pesca. Wilmer no recibió atención médica adecuada por lo que todavía estaba recuperándose.
Wilmer se sintió muy aliviado cuando encontró a COFADEH. En pocas horas, arreglaron que fuera examinado por un médico forense, puso una denuncia ante el Fiscal de Derechos Humanos y consiguió que su caso se empezara a procesar en el sistema de justicia.
Durante el día, un representante de COFADEH estuvo siempre al lado de Wilmer y su familia. En agosto, un oficial de la Marina había sido oficialmente acusado por el intento de Homicidio de Wilmer.
Manteniendo viva la memoria
Wilmer es sólo una de las muchas personas que ha representado COFADEH. La organización se ha convertido en la voz de las víctimas, y el lugar donde tiene que ir la gente que busca justicia.
Mantener viva la memoria histórica ha sido fundamental para sus activistas. No quieren que la responsabilidad del Estado por las 200 personas desaparecidas en la década de los 80’s sea olvidada.
Honduras tiene una población muy joven y que en su mayoría corre el riesgo de unirse a pandillas. Bajo el cobijo de COFADEH, una red nacional de jóvenes ha crecido.
Con seminarios y talleres, defensoras y defensores de derechos humanos experimentados ahora enseñan a jóvenes como reconocer y documentar las violaciones. Les alientan a participar en sus comunidades locales y a promover valores como igualdad y solidaridad.
Bertha Oliva, miembro fundadora de COFADEH y coordinadora general, nos dijo que los jóvenes son la fortaleza de la organización.
Esperanza y apoyo internacional.
La solidaridad internacional también es igual de importante. En la sala principal de la oficina de COFADEH está colgada una bandera rojo con palomas -su logo- cosidas a ella. Es un regalo de miembros de Amnistía en el Reino Unido, por los 30 años de la organización, que cumplieron el año pasado.
“La gente se siente conmovida cuando ve esas palomas”, nos dijo Bertha. “Ahora más que nunca, es importante continuar con la campaña de solidaridad y demandar que el Estado Hondureño respete el trabajo de las personas que defendemos los derechos humanos. Ellos pueden intentar cortar nuestras alas, pero nunca lo lograrán”.
COFADEH sigue apoyando la lucha de Wilfredo por conseguir justicia por el caso de Ebed. Un soldado está actualmente detenido y enfrentando cargos criminales.
Ya que Honduras va a las urnas para escoger un nuevo Presidente en Noviembre, la importancia de su trabajo defendiendo los derechos humanos – y el riesgo que esto implica – crecerá. Por favor envía una carta en su nombre – tus palabras pueden ayudar a apoyar y proteger a los miembros de COFADEH.
Busca más información en bit.ly/COFADEH
[RECUADRO]
¿Qué es un/a defensor/a de los derechos humanos?
- Los defensores y defensoras de los derechos humanos son personas que están preocupadas por los derechos de la gente, y los propios. Se definen por lo que hacen y por lo que luchan, sus acciones son siempre pacíficas.
- Un defensor o defensora se compromete a hacer realidad la promesa de justicia, los derechos humanos y libertades para todas y todos, aún cuando los temas en los que se vinculen sean controvertidos.
- El derecho de las personas a defender los derechos humanos es reconocido y protegido por el derecho internacional de derechos humanos.
- La Declaración de la ONU sobre Defensores y Defensoras de Derechos Humanos fue aprobada por la Asamblea General en 1998.
- Los Estados tienen la obligación de proteger a las defensoras y defensores de derechos humanos.
Información de contexto
Datos clave:
- En los últimos años, el nivel de violencia, inseguridad e impunidad en Honduras ha ido en constante aumento. El pasado 24 de noviembre se celebraron elecciones generales en el país. Antes de los comicios, Amnistía Internacional pidió a los candidatos presidenciales que abordasen la crisis de derechos humanos en el país y protegiesen a quienes defienden estos derechos.
- Uno de los principales motivos de preocupación en Honduras es la constante de homicidios, agresiones físicas y amenazas que sufren los defensores y defensoras de los derechos humanos, entre los que se encuentran indígenas, líderes afrodescendientes y campesinos, activistas de los derechos de gais, lesbianas, bisexuales y personas transgénero, periodistas y profesionales de la abogacía. La impunidad por todos estos ataques es casi absoluta.
- Según cifras de la ONU, el índice de homicidios en Honduras fue de 92 por cada 100.000 habitantes en 2011, la tasa más elevada del mundo. En el 82 por ciento de los homicidios cometidos en el país en 2010 se utilizaron armas de fuego. Sólo se investiga el 20 por ciento de los homicidios registrados en Honduras.
- En muchos casos, la policía y el ejército contribuyen de hecho a la violencia en vez de combatirla, una situación que se ve agravada por la casi total ausencia de rendición de cuentas por los abusos.
- Según el Instituto Nacional de Estadística, en 2010 más del 60 por ciento de la población vivía en la pobreza, y la situación de más del 40 por ciento era de pobreza extrema.