El primer ministro de Haití, Garry Conille, anunció en un discurso a la nación que declaró el estado de emergencia en los 14 municipios del país bajo la influencia de las poderosas bandas armadas, con miras a enfrentar a estos grupos y restablecer la seguridad nacional.
“Este estado de emergencia dará al Gobierno las herramientas e instrumentos necesarios para actuar, arrestar a los bandidos y luego restaurar la autoridad estatal. Pido a la población de los municipios afectados que permanezcan alerta y mantengan la calma”, informó el gobernante.
“El proceso que estamos a punto de iniciar no será fácil”, admitió. “A los bandidos les pido que depongan las armas, reconozcan la autoridad del Estado”, insistió, pidiendo el matrimonio de la población con la Policía en la lucha contra la inseguridad.
“Pido a la Policía Nacional de Haití, con el apoyo de las fuerzas de Kenia, que comience gradualmente el despliegue y las operaciones en áreas específicas según un plan preestablecido. El objetivo final es recuperar todas las zonas bajo control de las pandillas, casa por casa, distrito por distrito y ciudad por ciudad”, dijo Conille.
Asimismo, dijo que el Gobierno trabajará en la independencia de la Justicia, en luchar contra la corrupción y garantizar que todos los ciudadanos, cualquiera que sea su condición, sean iguales ante la ley.
“Vengo a anunciarles que, con el apoyo del Consejo Presidencial de Transición, implementaremos un conjunto de medidas concretas y decisivas para combatir la inseguridad y restablecer la paz en el país de una vez por todas”, dijo el primer ministro.
Según él, estas iniciativas marcarán un importante punto de inflexión en la lucha contra la “terrible experiencia” que viven los haitianos.