Un grupo de 18 abogados en Bolivia ha unido fuerzas para defender a Pantuque, un perro de raza shar pei, y evitar que sea sacrificado por orden judicial, ya que está retenido por haber causado lesiones “graves” a un niño y su madre.
La abogada y activista de la defensa de los animales, África Gutiérrez, confirmó hoy a Efe que en La Paz se han unido diez abogados para hacer un trabajo procesal del caso y que otros ocho juristas del interior del país se han sumado a la defensa para hacer una “presión a nivel nacional”
“Se está cometiendo una injusticia contra el animalito”, apuntó.
La denuncia data de agosto pasado cuando Pantuque mordió a un niño de 11 años reaccionando ante una supuesta agresión y después hizo lo mismo con la madre del menor que salió en su defensa.
El padre del menor, Ramiro Calderón, dijo a Efe que el niño fue mordido en varias zonas de su cuerpo y que la herida más grave fue en uno de los brazos, que recibió 23 puntos de sutura.
El menor estuvo internado una semana en el hospital, agregó.
La abogada argumentó que el perro “ha atacado a dos miembros de una sola familia que constantemente le producían daños, lo apedreaban y él tenía dos bajas médicas por esas circunstancias”.
El can actualmente se encuentra en un refugio de animales dependiente del municipio de La Paz en completo aislamiento mientras el proceso legal transcurre para ver si se aplica o no la eutanasia.
La fiscal de La Paz Susana Boyán ordenó en las últimas horas la detención de la propietaria de Pantuque, Claudia R., señalando su supuesta responsabilidad en la agresión del animal.
La propietaria dijo que cumplió con todos los gastos médicos de la agresión, algo que fue negado por los denunciantes.
El grupo de abogados alista una demanda en defensa del animal por “tentativa de biocidio” contra los denunciantes y las autoridades por considerar que están actuando fuera de la ley.
La abogada Gutiérrez enfatizó que no corresponde sacrificar al animal ya que la medida solo se da en casos de razas agresivas o por padecimiento del mal de rabia de acuerdo a la ley vigente.
La mujer espera para las próximas horas una audiencia judicial que podría determinar si es recluida de forma preventiva en caso de comprobarse que tuvo alguna responsabilidad en el ataque del can.