ESTAMBUL. Un grupo armado curdo reivindicó el viernes un atentado con coche bomba que mató a 11 personas e hirió a 36 en Estambul esta semana. En un comunicado en internet, los Halcones de la Libertad del Curdistán advirtieron a los turistas que ya no están a salvo en Turquía. “Ustedes no son nuestro objetivo, pero ya no están a salvo en Turquía”, afirmó el comunicado. “Acabamos de empezar la guerra”.
Turquía ha sufrido varios atentados en el último año, incluso dos ataques contra turistas en Estambul, que las autoridades atribuyeron al grupo Estado Islámico. Los ataques han crecido en escala y frecuencia, asustando a los turistas y dañando la economía, que depende en gran parte de los ingresos por el turismo.
Los Halcones de la Libertad del Curdistán son considerados una escisión del Partido de los Trabajadores del Curdistán (PKK) y han realizado varios atentados en el pasado.
El grupo criticó al gobernante Partido Justicia y Desarrollo, fundado por el presidente Recep Tayyip Erdogan, por su “guerra salvaje” contra los curdos.
El sureste de Turquía se sumió en la violencia el verano pasado al desplomarse tras dos años y medio una frágil tregua entre el estado y los rebeldes curdos.
El atentado del martes, en plena hora punta, se produjo tras un ataque suicida en la localidad suroriental de Midyat, que mató a tres policías y tres civiles.
El PKK dijo el jueves que el ataque de Midyat había sido obra de uno de sus “camaradas” con el nombre clave de Dirok Amed.
El PKK, considerado como una organización terrorista por Turquía y sus aliados, lucha por la independencia de los curdos turcos en el sureste del país. El conflicto se ha cobrado 40.000 vidas a lo largo de varias décadas.
Por DOMINIQUE SOGUEL