Por Dr. Willians De Jesús Salvador
Tras un juicio político considerado como exprés, fue destituido el presidente de Paraguay Fernando Armindo Lugo Méndez, quien había asumido la presidencia de la República del Paraguay el 15 de agosto del 2008.
Fernando Lugo, quien tiene posee una solida formación intelectual a los 18 años se forma como abogado, luego encuentra en las aulas rurales su vocación cristiana y en el 1977 se gradúa de Licenciado en Ciencias Religiosas en la Universidad Católica “Nuestra Señora de Asunción”, realizando una gran labor pastoral como misionero por un lustro en el Ecuador.
Expulsado del Paraguay en el 1982, estudió sociología en el instituto Gregoriano de Roma. Obispo en el 1994 de la diócesis San Pedro en el Paraguay donde se involucra en la lucha por las reivindicaciones campesinas. Renuncio en el año 2005 la cual fue aceptada por el Papa Juan Pablo ll y en el 2006 solicito permiso a la Santa Sede para dedicarse a la política, Se inscribió en el Partido Demócrata Cristiano, convirtiéndose en ente catalizador de los diferentes sectores de su país, logrando la victoria electoral con un margen de más del 10%, para ser el segundo presidente de izquierda en el Paraguay.
No voy a entrar en grandes detalles de su ejercicio presidencial, aunque hay que precisar los avances en el Sistema Sanitario del Paraguay, crecimiento económico de dos dígitos (14.5), reformas al a la educación con programas de computarización de los niveles básicos, el programa se llama “One Laptop per Child”. En su contra están los escándalos de paternidad que se hicieron públicos afectando gravemente su imagen.
Las noticias difundidas dan cuenta que el Congreso del Paraguay destituyó al Presidente Fernando Lugo, por mal desempeño de sus funciones y el presidente aceptó su destitución, quien está afectado de un cáncer que constituye un carga muy dura para cualquier ser humano, mucho más para las exigencias cotidianas que tiene un jefe de estado.
Según los analistas políticos suramericanos entre las causas de este golpe de estado parlamentario hay dos situaciones, la toma de tierra por campesinos en Curuguaty, acontecimiento que degeneró en un enfrentamiento entre policías y campesinos con un saldo de once muertos. Además se cuenta que el presidente Lugo tenía la intención de reelegirse, por lo que mantenía un enfrentamiento durante los cuatro años de su mandato con el vicepresidente de la Republica, que finalmente lo sustituyó.
Los gobiernos, organismo e instituciones democráticas del mundo han rechazado este “Golpe de Estado del Senado Paraguayo”. UNASUR,OEA, Venezuela, República Dominicana, Argentina, entre otras naciones.
Hay que airear el tema de los juicios políticos a los presidentes democráticos, las libertades soberanas parlamentarias en esa materia, la actividad política por el poder sigue siendo despiadada y cruenta. Cuando la plataforma congresual que sustenta al ejecutivo está en minoría, la democracia está sujeta a la irracionalidad política.
Recomiendo el brillante trabajo realizado por Aníbal Pérez Liñán, Juicio Político al presidente y nueva inestabilidad política en América Latina. Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires, 2009, 383 páginas.