SANTO DOMINGO. El vocero del Patronato Nacional Penitenciario Luis Eduardo Lora (Huchy) y la tesorera del organismo Fabiola Medina informaron que el presidente Danilo Medina construirá dos nuevas cárceles que servirán para albergar a los reclusos de La Victoria, así como un hospital penitenciario.
Ambos hablaron tras salir de una reunión que sostuvieron los miembros del referido patronato, encabezados por el arzobispo Francisco Ozoria, con el presidente Danilo Medina.
Sin embargo, Lora dijo que todavía no se han identificados los terrenos donde serán construidas las obras, pero que tiene la seguridad de que se iniciarán el próximo año.
Explicó que hay una gran necesidad de que se construyan centros que sustituyan La Victoria, donde los internos de este centro están en condiciones infrahumanas, lo que a su juicio constituye una vergüenza para los derechos humanos.
“Para nuestro agrado, nos encontramos con que el Presidente estaba en eso y nos dijo que está decidido hacer eso”, dijo.
Aclaró que no tiene la información si los terrenos donde se construirán los nuevos centros penitenciarios el gobierno los tiene ubicados, “pudiéramos decir que están pre-ubicados, pero a nosotros nos parece que eso se va a comenzar el año que viene”.
Subrayó que estos centros no se han hecho porque al Presidente le pareció mucho dinero el presupuesto que le presentó la Procuraduría y han mandado hacer un presupuesto y agregó que “uno de los miembros del patronato es el ingeniero Abraham Selman y le dijo que sí, que el presupuesto se puede reducir mucho”.
Sostuvo que las dos cárceles, La Victoria 1 y La Victoria 2, se construirán para el Nuevo Modelo Penitenciario, “porque el Patronato Nacional Penitenciario respalda al nuevo modelo porque precisamente es para humanizar las cárceles”.
En tanto, Fabiola Medina citó entre las precariedades que viven día a día los nueve mil internos de La Victoria, están el hacinamiento, el peligro de incendio, las inundaciones, “porque La Victoria está construida en un terreno que se inunda con tres gotas de agua, porque no son las condiciones infrahumanas que viven los internos, sino el riesgo de su propia vida”.
