SANTIAGO.-El general de brigada Orison Olivence Minaya, director del comando regional Cibao Central de la Policía Nacional, convenció al sacerdote Rogelio Cruz para que junto a un grupo de dirigentes choferiles abandonara la sede de la gobernación provincial, que mantuvieron ocupada por varias horas.
“Ese es mi amigo, ahora sí vamos a salir todos pacíficamente porque aquí no hay gobernadora”, expresó el padre Rogelio tras un abrazo con el general Olivence Minaya, en la segunda planta del local de la Gobernación Provincial, en la Calle Del Sol, frente al parque Duarte.
Mientras que el presidente de la Federación de Trabajadores del Transporte de la Región Norte (FETTRANRENO), Gervasio de la Rosa, al entregar un documento dirigido al presidente Danilo Medina, también manifestó su confianza de que el mensaje le llegará al primer mandatario a través del general de la Policía.
De la Rosa criticó que la gobernadora provincial Aura Toribio dejara plantado por más de tres horas a los dirigentes choferiles, y tuviera que mediar un general de la Policía para convencer a Rogelio Cruz y sus acompañantes de abandonar la Gobernación Provincial.
De su lado, el director del Comando Regional Cibao Central de la Policía informó a los directivos de los sindicatos de choferes, que hará llegar el documento hasta el Presidente de la República, a través de la vía correspondiente.
La marcha-caravana de los choferes partió de la explanada frontal del Monumento a los Héroes de la Restauración y recorrió la Avenida las Carreras, Presidente Antonio Guzmán y tomo la calle Del Sol hasta llegar a la Gobernación Provincial.
Además de FETTRANRENO, la actividad fue respaldada por los gremios de choferes de los municipios y el sindicato de guaguas de la región norte, entre ellos Santiago Rodríguez, Guillermo López, Julián Núñe y Domingo Matías.
Los reclamos de los choferes son arreglo inmediato de todas las calles de la ciudad, así como de las avenidas, carreteras y caminos vecinales.