San Juan, Puerto Rico.-EFE-Alejandro García Padilla, del autonomista Partido Popular Democrático (PPD), fue investido como gobernador de Puerto Rico, ceremonia en la que exigió una convergencia entre todos los puertorriqueños para construir un mejor lugar de convivencia.
“La solución no está en los anaqueles de una farmacia, sino en nosotros, la fuerza está en el corazón de cada puertorriqueño. La fuerza de nuestro país, está en nuestro país”, indicó García Padilla, de 41 años, el político más joven en asumir la gobernación en la isla.
Los problemas de seguridad en Puerto Rico alcanzaron su pico en 2011 cuando se sobrepasaron los 1.000 asesinatos, aunque para 2012, se logró una merma de más de 150 homicidios.
La elección de García Padilla el pasado 6 de noviembre como nuevo gobernador deja en sus manos la tarea de poner freno a un problema que el jefe del Ejecutivo definió de “epidemia”, por la media de 30 asesinatos por cada 10.000 habitantes que se registran en Puerto Rico.
El incremento en la utilización de la vía caribeña para introducir cocaína en Estados Unidos ha convertido a Puerto Rico en puerta de entrada de la droga hacía el país norteamericano.
Parte de esa droga se queda en la isla, donde bandas locales se disputan a punta de pistola el control de los puntos de venta de estupefacientes.
La economía, por su parte, se vio bastante afectada durante el pasado cuatrienio cuando el exgobernador Luis Fortuño despidió a más de 20.000 empleados del Gobierno y el sector privado no tuvo la capacidad para contratarlos.
“Vivimos con índices de desempleo y deuda pública más altos de lo que pensábamos, y las estadísticas angustiantes de criminalidad han hecho que Puerto Rico se mire a sí mismo y no se reconozca”, lamentó García Padilla, padre de tres hijos.
Destacó que es momento de que los puertorriqueños pasen “de la preocupación a la ocupación”, por ser una “tierra de talentos, empeños y hazañas, de solidaridad entre su gente en lugar de conflictos”.
“Otro resurgir es alcanzable. Si no somos honestos ni transparentes, estamos mal. Los problemas son muy serios. No se pueden minimizar los problemas, ni se pueden esconder. Puerto Rico apuesta a la recuperación del país. Cada puertorriqueño está comprometido con la convergencia”, agregó el exprofesor de Derecho.
Reconoció que la recuperación para un mejor lugar de convivencia “es un camino que se logrará paso a paso” y que los mayores problemas no se resolverán de la noche a la mañana.
“En algunos temas requerirá poco y en otros, más. Lo importante es que pongamos en marcha la agenda de reconstrucción y la ejecutemos sin titubear”, afirmó.
García Padilla, del PPD, llegó a la gobernación tras desbancar en las pasadas elecciones a Luis Fortuño, del anexionista Partido Nuevo Progresista (PNP).
A la investidura de García Padilla asistieron el presidente de República Dominicana, Danilo Medina; el gobernador de Maryland, Martin O’Malley, y los congresistas Nydia Velázquez, Luis Gutiérrez y Jerry Costello.
También hubo líderes de países como Costa Rica y de las islas caribeñas de San Martín, Guadalupe, Anguila y Martinica.
A la comitiva se unió también Colm O’Macartum, director de la Asociación de Gobernadores Demócratas.
García Padilla logró su victoria al derrotar a Fortuño en las pasadas elecciones generales el 6 de noviembre por más de 11.000 votos.
El nuevo gobernador consiguió un total de 896.060 votos o un 47,73 por ciento de los electores frente a los 884.775 votos o 47,13 por ciento que obtuvo Fortuño.