La tormenta tropical Fiona se debilita en su rumbo hacia el oeste-noroeste por aguas del Atlántico y hoy podría degradarse a depresión tropical, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) e EE.UU.
Según su último boletín, emitido a las 05.00 horas, Fiona mantenía en ese momento vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora, con rachas más poderosas, y se encontraba a 1.610 kilómetros al este de las islas de Barlovento.
La sexta tormenta tropical de la temporada de huracanes en la cuenca atlántica mostraba un rápido avance, a 20 kilómetros por hora, hacia el oeste-noroeste.
El NHC prevé que Fiona aumente su velocidad de traslación en los próximos días, lo que contribuirá todavía más a su debilitamiento.
Por ello, los meteorólogos estiman que la tormenta tropical se degradará y disipará a inicios de la próxima semana.
Mientras tanto, Fiona, cuyos vientos se extienden 130 kilómetros desde su centro, se encuentra en medio del océano Atlántico y no se prevé que afecte a zonas habitadas.
La semana pasada la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA) actualizó su previsión para la temporada de huracanes en el Atlántico, que se espera algo más activa de lo normal, con la formación de 12 a 17 tormentas, de las cuales entre 5 y 8 pueden llegar a ser ciclones y, de estos, entre 2 y 4 de categoría mayor.
Los científicos estimaron además que la actual temporada, que concluye el próximo 30 de noviembre, será la más activa desde 2012.
Hasta la fecha, en la actual temporada de ciclones se han registrado seis tormentas con nombre, incluyendo dos huracanes, Alex y Earl.
Cuatro de ellas tocaron tierra: Bonnie y Colin alcanzaron los estados de Carolina del Sur y Florida, respectivamente, mientras que las costas de Belice y México se vieron azotadas por Danielle y Earl, que dejó en este último país al menos 54 muertos