La Dirección Universitaria del Frente Estudiantil de Liberación Amín Abel (Felabel) rechaza categóricamente la versión policial que vincula nuestra organización con la muerte del Coronel Julián Suárez Cordero ocurrida el martes pasado en las inmediaciones de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
El Felabel lamenta la muerte del Coronel Suárez Cordero y entiende que la misma debe ser debidamente investigada, por lo que estamos en la mejor disposición de que cualquier dirigente o miembro de nuestra organización que sea requerido por el Ministerio Público acuda a responder cualquier cuestionamiento.
Es preciso desmentir que el compañero Wilson Daciel Nicasio sea el responsable o tenga alguna vinculación con muerte de del Coronel Suárez, por lo que expresamos nuestra disposición de dar la cara por él y de defender su inocencia en todas las instancias que corresponda.
Si fuésemos a buscar culpables, el primer culpable es el gobierno que encabeza Danilo Medina y el PLD, que frente a una huelga convocada con un mes antes, se niega a dialogar y en vez de enviar a sus ministros a tratar la problemática, envía 400 militares y cientos de policías con armas largas con el claro mandato de reprimir.
La Jefatura de Policía Nacional ha procedido de forma prejuiciada, tendenciosa y violatoria de los derechos, evidenciando una franca actitud vengativa, lo que se traducirá en una investigación viciada y sin sentido de justicia, cuyos resultados serían carente de valor jurídico.
La institución policial transita por el camino de la búsqueda de un “culpable” y para ello utilizará chivatos, gratuitos y a sueldo, y fabricará “pruebas” y “testigos”, algo que no causará sorpresa a quien conozca de ese organismo del Estado desde su creación durante la dictadura de Trujillo.
El general José Armando Polanco Gómez, jefe de la Policía Nacional, tras la muerte del Coronel Suárez, expresó textualmente lo siguiente: “Los que cometieron eso los vamos a buscar, no importa a quien tengan de sombrilla. Les vamos a dar una respuesta que va a ser tal para cual”.
El jefe policial también ha sido enfático y reiterativo al catalogar el hecho de “terrorista”, como si buscara actuar a manos sueltas y justificar cualquier respuesta policial a lo acontecido.
Hasta aquel que no sea buen entendedor puede colegir que la Policía Nacional tiene la decisión de reprimir y de hacer correr sangre.
Lo expresado por el General Polanco Gómez es una sentencia de muerte dictada para quien o quienes ellos presuman son los responsable de ultimar al Coronel Suárez.
A pesar de la sentida muerte del oficial, los agentes de la uniformada ni Jefatura de la PN, en aras de aclarar un hecho, deben actuar o proceder al margen de la ley ni mucho menos violar los derechos individuales de los ciudadanos que deban ser investigados, consagrados en la Constitución de la República.
Es precisamente lo anteriormente dicho lo que ha hecho la Policía Nacional, al realizar diversos allanamientos a altas horas de la noche en casas de presuntos implicados en la muerte del Coronel Suárez. Es también violatorio apresar a familiares, como sucedió con la señora Flordaliza Nicasio Montilla, madre del compañero Wilson Daciel Nicasio, y sus hermanas Mairelis Javier y Dawilda Javier Nicasio.
Por otra parte, entendemos que no solo la muerte del Coronel Suárez Cordero debe ser esclarecida, sino que también la PN debería mostrar el mismo empeño en investigar y someter a quién o quienes en San Francisco de Macorís hirieron a Ramón Martín Sánchez, agente de la Policía Nacional, aunque se trate de un simple raso.
Asimismo, se debería ser investigar los hechos acontecidos en San Francisco de Macorís, como la muerte de Félix Hernández Peralta, según testigos a manos de la PN; identificar la patrulla que hirió en sus piernas a los compañeros Edison Paulino y Darlin Lora, luego de haber sido apresados; establecer cuáles agentes le dieron un cartuchazo en la cara al joven Junior Matías, en momentos en que se encontraba en su casa; debería someter a la justicia a los agentes actuantes en los casos del señor Juan Pastor, herido cuando llegaba a su casa, y de Bernardo Rosario Almánzar, quien recibió varios disparos en ambas piernas, según los moradores víctimas de agentes de la Policía.
El Felabel exige una comisión especial independiente de la Policía Nacional sea designada para realizar realizar las investigaciones, a fin de gara