El diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), por la provincia de Santiago, Gregorio Domínguez fue recibido por una multitud, que dijo haber creído en su inocencia, tras haber sido absuelto del juicio, por supuesto desalojos, abusos y destrucción, en las comunidades de Punta Rucia y playa La Ensenada.
Rodeado de familiares y seguidores que agitaban banderas, en medio de un ambiente de alegría, el legislador oficialista de la Circunscripción número Uno, agradeció primero a Dios, segundo a su familia y a los compañeros de partido que siempre creyeron en él y su inocencia.
“Dos años siendo maltratado, pisoteado y humillado, todo aquel que no encontraba de que hablar, hablaba de Fausto Domínguez, todo lo que tengo, cada peso que tengo ha sido fruto del esfuerzo, el sacrificio mío y de mi esposa”, expresó.
Dijo que nunca les ha hecho daño a nadie, “ustedes que me conocen y saben cómo yo he sido, que me he quitado el pan de mis hijos, para ayudar a resolver problemas de mi comunidad y de mi gente”.
No obstante dijo que no les guarda rencor a nadie porque en su corazón, no hay espacio para el odio, por lo que lo perdona, como dijo su líder y mentor, el doctor José Francisco Peña Gómez.
Domínguez reiteró las gracias a los miembros de la prensa, a la gente de Gurabo que siempre les han acompañado, por haber ido a dicho recibimiento, el cual tuvo lugar la tardes este viernes en la calle 20 esquina carretera Gregorio Luperón, y agradeció además a la Circunscripción Uno que lloró junto a su familia.
Por su condición de legislador Gregorio Domínguez (Fausto), fue enviado a la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia, donde se les conoció el juicio por dichas acusaciones.






