La familia Espinal Vargas, propietaria de Transporte Espinal, expresó su pesar por la agresión física que recibió una de sus integrantes a manos de desconocidos y lamentan que este no será ni el primer ni el último caso similar que ocurra en el país debido al grado de violencia con que viven los dominicanos.
“Lo más lamentable de este caso es que nuestra familia no será la única ni es la primera en vivir esta situación, sino que esto puede repetirse con cualquier familia dominicana”, manifestó Freddy Espinal, hijo de los dueños de la compañía que comunica con autobuses a Santiago con la capital dominicana.
La joven María Espinal Vargas, quien estudió Gestión Financiera y Auditoría en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, fue atacada la noche del 26 de julio por desconocidos que entraron a su apartamento, ubicado en Los Jardines Metropolitanos, en Santiago.
Según declaraciones de la familia, que hoy emitió un comunicado público, los criminales entraron a través de las escaleras de emergencia y le propinaron golpes hasta dejarla casi a punto de la inconsciencia. Sin embargo, no llevaron ningún objeto de valor.
Debido a la golpiza, María Espinal Vargas, de 31 años, quien se desempeña como contadora del grupo empresarial de su padre, recibió las primeras atenciones médicas en el país pero tuvo que ser traslada a Miami, Estados Unidos para recibir tratamientos.
En la actualidad Espinal Vargas se encuentra estable.
La familia agradeció el empeño de la Policía Nacional en el caso, y confía en que estarán concluyendo este capítulo con las acciones legales correspondientes.
Transporte de autobuses Espinal, con su sede principal en Santiago, tiene una amplia flotilla de unidades que viajan desde hace años de lunes a domingo, a Santo Domingo.