SAN FRANCISCO, Estados Unidos. El gigante de las redes sociales Facebook seguía este jueves en medio de un temporal de alcance global ante el escándalo por violaciones a la privacidad de sus usuarios, a pesar de las excusas presentadas por su fundador y máximo ejecutivo, Mark Zuckerberg.
Zuckerberg se disculpó el miércoles mediante un texto publicado en Facebook por los “errores” que permitieron a una empresa de consultoría política capturar datos personales de decenas de millones de usuarios y prometió cambios, pero las autoridades británicas, que pretenden escucharlo personalmente, no parecen muy convencidas.
“Por la noche vi que Mark Zuckerberg se había disculpado y que iba a introducir algunos cambios, pero francamente no creo que esos cambios vayan lo suficientemente lejos”, dijo el ministro británico de Cultura, Matt Hancock, a la radio BBC.
Facebook está bajo intenso fuego cruzado luego de que la empresa británico-estadounidense Cambridge Analytica (CA) fuera acusada de haber capturado sin su consentimiento datos de 50 millones de usuarios para elaborar un programa que hace posible predecir la votación de los electores, información que fue utilizada en la campaña presidencial de Donald Trump en 2016.
En la visión de Hancock, sin embargo, el “mea culpa” de Zuckerberg quedó corto.
“No debe corresponderle a una empresa decidir cuál es el equilibrio correcto entre privacidad e innovación y el uso de datos, esas reglas las tiene que decidir la sociedad en su conjunto y así debe establecerlas el Parlamento”, argumentó Hancock. “Esa es la estrategia de la que estamos hablando: las grandes empresas tecnológicas tiene que obedecer la ley y nosotros fortalecer la ley”, sentenció.
En Bruselas, los líderes europeos envían el mismo mensaje, cuando se preparan para presionar por mayores controles sobre los datos personales en línea, mientras que Israel se suma a los países que inician una investigación sobre Facebook.
Proteger información
“Tenemos la responsabilidad de proteger sus datos, y si no podemos hacerlo no merecemos servirles”, escribió en su muro Zuckerberg en el primer comentario que hizo tras el estallido del escándalo.
“Las medidas más importantes para que esto no suceda nuevamente fueron tomadas hace años, pero también cometimos errores y hay más por hacer”, agregó.
En su descargo, Zuckerberg explicó que su equipo supo que Cambridge Analytica había capturado datos de millones de usuarios y solicitó a la empresa la eliminación de esa información. Según dijo, Cambridge Analytica ofreció pruebas de que había eliminado esos datos, aunque luego Facebook supo que aparentemente eso no había ocurrido.
El multimillonario ejecutivo dijo que estaba dispuesto a prestar testimonio ante el Congreso estadounidense, y en una entrevista con CNN sugirió incluso que estaría abierto a una regulación externa de las operaciones de una red social con las características de Facebook.
“En realidad no estoy seguro de que no debemos ser regulados”, dijo Zuckerberg a CNN. Y estimó que lo ocurrido había sido una “abuso de la confianza muy importante, y sentimos mucho que eso haya ocurrido”.
No obstante, analistas han observado que el método de recolección de datos personales utilizado por Cambridge Analytica se apoyó precisamente en el modelo de negocios que tornó a Facebook un fenómeno de las redes sociales.
Max Schrems, un activista basado en Viena y que llevó a tribunales europeos casos en defensa de la privacidad en línea, dijo a AFP que ya había presentado quejas ante la Autoridad de Protección de Datos de Irlanda en 2011, a raíz de los controvertidos métodos de recolección de información personal.
Modelo de negocios
Sandy Parakilas, ex gerente de productos en Facebook y quien fue interrogado por una comisión parlamentaria británica, afirmó que “Facebook sabía de todo lo que estaba ocurriendo, y no previno a nadie”.
En declaraciones publicadas por The Washington Post este jueves, otro exfuncionario de Cambridge Analytica, Christopher Wylie, apuntó que “Facebook no ha cooperado”.
Aleksandr Kogan, el psicólogo que desarrolló la aplicación que sirvió a Cambridge Analytica para hacerse con los datos de millones de usuarios de Facebook, afirmó el miércoles que era legal y se ajustaba a los términos de uso.
Kogan, profesor de psicología de la Universidad británica de Cambridge, dijo a la BBC que lo que hizo era “perfectamente legal y ajustado a los términos de servicio”, y lamentó que tanto Facebook como Cambridge Analytica le estén usando de “chivo expiatorio”.
“Mi opinión es que estoy siendo usado básicamente como un chivo expiatorio”, se defendió Kogan, contratado por Cambridge Analytica, uno de cuyos fundadores fue Steve Bannon, que acabaría trabajando de estratega de campaña de Trump.
El caso ha dado pie a un movimiento para desabonarse de Facebook, iniciativa que este miércoles recibió el respaldo de uno de los fundadores del sistema de mensajería WhatsApp.
“Elimina Facebook” (#deletefacebook”) escribió Brian Acton en Twitter recurriendo a la etiqueta que se ha popularizado estos días. “Elimina y olvida. Es momento de darle importancia a la privacidad”.