SANTIAGO.-La diversificación de proyectos habitacionales y asentamiento humanos, que en los últimos años ha experimentado un crecimiento acelerado en el municipio de Santiago, ha desmejorado los servicios básicos, como agua potable, recogida de desechos sólidos, bacheo de las calles, entre otros.
En las dos últimas décadas, la ciudad de Santiago se ha expandido en toda sus direcciones con la creación de decenas de barrios marginados que se han levantado en las afueras de la ciudad, tanto en la parte norte, oeste, sureste, este y sur.
Sectores como Cienfuegos, Bella Vista, Las Charcas, Herradura, Otra Banda, Pekín, La Ceibita, El Papayo, Matanza, Hato Mayor, Don Pedro, Los Reyes, Jacagua, Los Salados, Los Tocones, experimentan un crecimiento poblacional acelerado.
A ello se suma la construcción de cientos de proyectos de apartamento a todo lo largo y ancho del municipio, como es el caso de Gurabo, Carretera Duarte hacia el municipio de Licey, Autopista Duarte, La Barranquita, Yapur Dumit, Cecara, Villa Verde, el área metropolitana y otras zonas.
Estos nuevos asentamiento poblacional han disparado la demanda de agua potable, que en medio de la crisis, generada debido a la larga sequía que afectó el país, ha disminuido la capacidad de respuesta de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (CORAASAN).
Lo mismo ha ocurrido con la energía eléctrica, servicio de recogida de basura y el transporte, que con la casis total desaparición del servicio que ofrecía de Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA), el caos se ha apoderado de quienes utilizan transporte público, en las horas picos.
Porque todos los empleados tanto público y privado entran y salen de sus centros de trabajo a la misma hora, lo que provoca un congestionamiento de pasajeros en calles y avenidas de la ciudad, generando inconformidad en los usuarios.