La Guardia Costera de EE.UU. evalúa el estado de la estructura del barco incendiado el miércoles en las cercanías de San Juan antes de autorizar el remolque a puerto del crucero, sin que se haya detectado derramamiento de combustible.
El portavoz de la Guardia Costera en San Juan, Ricardo Castrodad, dijo a Efe que equipos de la agencia federal accedieron hoy al interior del Caribbean Fantasy para evaluar la situación del barco, cuyo casco no presenta señales de daños estructurales.
El funcionario indicó que los equipos examinan la estructura y los daños causados por el incendio, que afectó principalmente a la sala de máquinas.
Castrodad destacó que el paso más importante ahora es asegurase de que el casco y la estructura pueden aguantar el remolque de la embarcación a puerto, una operación para la que todavía no hay fecha.
Dijo que durante la jornada de hoy un equipo de buzos trabajará para comprobar en qué estado se encuentra el casco, ante el temor de que una fractura pueda entorpecer el remolque o provocar una fuga de combustible.
“Hay restos de pintura y cenizas, pero no se ha detectado ningún derrame de combustible en las cercanías del barco”, indicó el funcionario sobre el Caribbean Fantasy, visible desde varios puntos de El Viejo San Juan, el área histórica de la capital puertorriqueña.
Resaltó que se toman todas las precauciones necesarias en caso de que pudiera registrarse una fuga de combustible, por lo que hay preparadas barreras flotantes que serán utilizadas para contener un hipotético derrame.
En cuanto a la búsqueda de dos perros a bordo, reclamados por sus dueños, que no pudieron llevarlos a tierra durante la evacuación, el funcionario indicó que fueron encontrados muertos.
El temor de las autoridades locales a un derrame fue la causa de que el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) de Puerto Rico trasladará a varios manatíes a un centro de conservación del interior de la isla.
Dos manatíes que se adaptaban a la vida libre en el mar en un área acotada de la playa Punta Salinas en Toa Baja, municipio cercano a San Juan, fueron llevados al Centro de Conservación de Manatíes de la Universidad Interamericana en Bayamón, donde estarán hasta que se disipe cualquier riesgo de derrame.
America Cruise Ferries, la naviera propietaria del Caribbean Fantasy, no ha informado todavía de la posible causa del incendio.
Dada la complejidad de la situación se puso en marcha nada más registrarse el accidente un comando unificado encabezado por la Guardia Costera de Estados Unidos.
Esa agencia federal coordina el trabajo de la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU., la Junta de Calidad Ambiental de Puerto Rico, el Departamento de Recursos Ambientales de Puerto Rico y la naviera propietaria del Caribbean Fantasy.
También participan en las operaciones la compañía de salvamento Ardent Global, el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de EE.UU., la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencia y Desastres, el Cuerpo de Bomberos y la Autoridad de Puertos de Puerto Rico.
El Caribbean Fantasy, proveniente de República Dominicana, se incendió el miércoles a pocos kilómetros de atracar en San Juan por razones que todavía se desconocen.
Más de 500 personas fueron evacuadas durante la operación de rescate y atendidas en un hospital de campaña instalado en el Puerto de San Juan.
Las autoridades sanitarias puertorriqueñas informaron que las personas atendidas sufrían, principalmente, de mareos por inhalación de humo y crisis de ansiedad.
No se reportaron heridos de consideración, aunque una persona sufrió una fractura en una pierna y otra un principio de ataque cardiaco.
